LA TRANSMIGRACION DE UN GRAN JEFE

capitulo 106

A medida que se acercaba la celebración del Año Nuevo Chino, todo el mundo se llenaba de un aura festiva. No solo se podía escuchar la música de Año Nuevo por todas partes, sino que también se podían ver linternas y cintas de colores rojos colgando en cada esquina. Hubo un aumento en el tráfico en la carretera de personas que regresaban a casa. Incluso la frecuencia de los aviones que volaban por encima aumentó mucho.

La atmósfera del Año Nuevo chino era aún más densa.

Al resolver la mayoría de los planes y arreglos para el Año Nuevo chino, Rong Qing finalmente pudo hacer algo de tiempo para reunirse con Lin Ji.

Simplemente se sentía... muy eufórico.

Sin embargo, el clima se negó a cooperar.

Las dos personas solo se conocieron por un momento antes de que una gran tormenta de nieve pesada comenzara a caer del cielo, interrumpiendo sus planes de salir.

Rong Qing miró al cielo y se volvió loco por dentro.

¡Qué tiempo más estúpido! ¡Papá quiere tener una cita! ¡Pronto, papá estará demasiado ocupado para tener citas! ¿De verdad elegiste un momento como este para detener a papá? ¡Te mataré!

Lin Ji vio los copos de nieve que caían y sintió que era algo desafortunado. Sin embargo, cuando se volvió y vio al terriblemente furioso Rong Qing resoplando y resoplando, Lin Ji se quitó el sombrero y se lo puso en la cabeza a Rong Qing.

"Ya que es así, ¿por qué no vamos a mi casa? Podemos hacer y comer albóndigas juntos, ¿qué te parece? En este tipo de clima, es mejor no ir a ningún lado".

El copo de nieve aterrizó en la oreja de Rong Qing, se derritió y estaba lo suficientemente frío como para hacerlo temblar. No pensó mucho antes de aceptar: "Entonces vamos rápido. Hace mucho frio afuera."

¡Este clima estúpido! ¡Papá se está muriendo de frío!

Cuando llegaron a la casa de Lin Ji, Rong Qing no pudo resistirse a hacer un sonido de sorpresa cuando entró por la puerta. La habitación que antes se veía limpia y ordenada todavía estaba iluminada por las ventanas. Ahora, sin embargo, algunas pequeñas y lindas linternas colgaban sobre sus cabezas. Cada pocos pasos, podía ver recortes de papel pegados en las ventanas. Incluso se colocó una sonriente muñeca de la fortuna en el armario de los zapatos.

Era como si el espíritu del Año Nuevo chino estuviera impreso en el papel. Rong Qing miró a los alrededores. Su cuerpo, que estaba congelado por la nieve, se sintió como si hubiera sido tocado por un aura roja y brillante y lentamente comenzó a calentarse.

"Ayer fue la víspera de Año Nuevo. Ordené un poco y compré algunos materiales para hacer albóndigas". Lin Ji dijo sonriendo mientras tomaba un par de pantuflas esponjosas para que las usara Rong Qing y ayudaba a quitar la nieve de su cuerpo.

"La tienda de cerdos vende cerdos negros. El olor de su carne no es tan fuerte y sabe mejor que el cerdo normal. Elegí especialmente una porción que es más adecuada para hacer albóndigas. También compré algunas costillas de cerdo. Si te quedas hasta tarde, ¿puedo hacerte unas costillas agridulces?

Con los pies pisando pantuflas esponjosas y cálidas, Rong Qing no escuchó por completo lo que dijo Lin Ji con claridad. Terminó un par de veces de acuerdo y salió corriendo vertiginosamente hacia la sala de estar.

¡Vio un árbol con bolsas rojas colgando de él! ¿¡Las bolsas rojas tenían dinero!?

Al verlo correr hacia el árbol de la bolsa roja, Lin Ji guardó su abrigo mientras sacudía la cabeza. A veces no podía evitar preguntarse si tenía 20 años o era Rong Qing el de 20 años.