capitulo 109

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Rong Qing abrió el correo electrónico y luego tiró su teléfono.

¡Ai, qué hombre más frío y despiadado, asistente principal He!  ¡Es Año Nuevo y su cabeza solo estaba llena de sus bonos de gato!

¡Pei!  ¡Escoria!

¡Ya es el Año Nuevo chino, pero todavía no vienes a ver cómo está papá!  ¡Te quitaré los bonos de gato!

Acostado y mirando al techo por un rato, Rong Qing se quejó y se deslizó en la cama antes de recuperar su teléfono.

Lo miró de nuevo.

Ze.  Como se esperaba del asistente principal, He logró infiltrarse en el grupo con tanto éxito.  Realmente jodidamente impresionante.

¿Cuántos fanáticos de CP hay actualmente, solo una docena más o menos, verdad?  Si continúa desarrollándose, ¿habrá cientos, miles, decenas de miles en el futuro?

Rong Qing murmuró un poco, luego hizo clic con seriedad en el ícono del asistente He y le envió un bono de gato.

¡Mientras la tarea se haga maravillosamente, puedes tener tantos bonos de gato como quieras!

Gastando algo de dinero nuevamente, Rong Qing experimentó brevemente esta felicidad reservada para las personas ricas.  Pero después de ni 5 minutos, ya perdió su sabor.

¡Este tipo de felicidad es realmente demasiado breve!  ¡No puede durar!  ¡Papá quiere un tipo de felicidad más permanente!

Dándose la vuelta, Rong Qing estiró su brazo para agarrar la jaula de pollo dorada en su mesita de noche.  Abrió furtivamente su pequeña cerradura.  Apretando los labios con fuerza, sacó con cuidado el trozo de papel del interior.

Miró fijamente la hoja de papel durante un rato, hundió la cabeza en las sábanas y comenzó a reírse.

Aiya~ ¡Aunque la estúpida foca me perjudicó, por pura suerte, me permitió conocer al cachorro de lobo más asombroso!

Jejeje, no pudo resistir reírse a carcajadas.

Mirando la jaula un poco más, se rió aún más incontrolablemente.

Después de un tiempo, secretamente extendió la mano y agarró un bolígrafo.  Abriendo la tapa del bolígrafo, Rong Qing colocó el papel plano y con cuidado dibujó un pequeño corazón rojo junto a la palabra "sí".

Sosteniéndolo y apreciando el resultado por un momento, Rong Qing pensó por un momento y luego rodeó la palabra "sí" con un corazón también.

¡Los dos corazones rojos estaban uno al lado del otro en el papel, al igual que los dos corazones en la parte superior de la jaula de pollo!

Rong Qing lo miró repetidamente, mirándolo desde la izquierda y la derecha.  Luego, como un ladrón, en silencio dibujó una flecha a través de los dos corazones.

Jeje!

¡Perfecto!  ¡Como se esperaba de mí!

Cuanto más pensaba en ello, más sentía subir el calor en su rostro.  Rong Qing volvió a colocar con cuidado el trozo de papel y lo volvió a cerrar con llave.  Luego, en pantuflas, salió a la terraza de la ventana y respiró unas cuantas bocanadas de aire fresco.

…… ¡Joder!

¡Tan frío!

Cerrando la ventana de inmediato, la expresión de Rong Qing permaneció igual.

¡Este apartamento no era bueno!  ¡Esta noche, debe irse a vivir a otra residencia!

Sin embargo, este soplo de aire frío realmente enfrió su calor.  Soplado así, la cabeza de Rong Qing finalmente se aclaró un montón.

LA TRANSMIGRACION DE UN GRAN JEFEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora