Nueva vida (Ban x Malereader/Maleoc)

Capitulo 5. Nuevo Comienzo

Los días se volvían semanas, las semanas en meses y esos meses en años, más específicos cuatro años, cuatro años donde un poco de felicidad se formaba en el corazón de un hada que había perdido todo a costa de otra raza.

Lex ese era el nombre que muchos caballeros respetaban y que otros temían, pero como terminó así, pues.

Después del festival de pelea al que había asistido por curiosidad, ahora se encontraba caminando o mejor dicho, volando junto al caballero que había conocido, solo mientras este lo guiaba en sí camino al hogar de donde provenía.

- Así que eres un hada?, es demasiado interesante el conocer a otra especie que sea parecida a nosotros lo humanos, aunque todos ustedes parecen más adolescentes que otra cosa.

Dijo con cierta alegría, algo que le causó cierta felicidad a él hada, pero solamente recordó a cierto chico.

- Exactamente cuánto tiempo más faltan para llegar a ese reino llamado Camelot?.

Pudo notar cierta alegría en el joven de no más de veinticinco años, algo curioso para poder entender si actitud burlona, habían estado viajando almenos tres días donde pudieron conocerse más.

– Pues no falta mucho, ya quiero llegar, estoy seguro que te encantará el lugar, y más por todas las mujeres del lugar, y el alcohol de ese lugar es muy bueno.

Dijo mientras giraba su cabeza para poder apreciar a su compañero de viaje.

– Acaso a todos los humanos sólo les importa el alcohol y el cuerpo de las mujeres?.

– Bueno, la verdad no, aveces también nos gusta pasar el tiempo en lugares tranquilos y en otros sólo estar con las personas que nos importan, compañeros y amistades, así pasamos el tiempo, la vida de nosotros es muy corta, pero aun así hacemos muchas cosas para ser recordados, aunque sólo son recordados distintas personas que nunca volveremos a ver.

Dijo con un tono triste, se podía notar que estaba hablando de alguien en específico, pero eso sólo le dio curiosidad al hada.

– No pensé en eso, nosotras las hadas nunca pensamos en cosas así, nacemos de las plantas y los árboles y vivimos en los bosques, no tenemos guerras y cosas como ustedes, así que cuando hacemos algo distinto es normal dudar, no nos acercamos a los humanos para evitar que estos roben nuestras alas, muchos pagaron un alto precio por eso.

– Veo que incluso ustedes tienen sus propios problemas para ser felices.

Dijo y ambos solo siguieron su camino, uno que estaba siendo más agradable para ambos.

...

– Mira ya llegamos.

Indicó mientras a lo lejos se podía ver un reino bastante impresionante, uno que el hada jamás logró imaginar.

– Vamos, cerca de aquí hay un estanque donde podremos limpiarnos, sígueme.

Indicó mientras se alejaba a una gran velocidad, algo que le pareció curioso a él hada que solamente se fue acercando a dónde estaba su compañero de viaje temporal.

Al llegar junto a su compañero sólo se quedó viendo aquel estanque de agua cristalina donde al acercarse su reflejo se mostraba de una menta tan idéntica que incluso sintió poder mágico en aquel lugar.

– Es impresionante, no?, muchos caballeros venimos aquí para poder recuperarnos de misiones o cosas así, se cuenta que este estanque fue muy importante hace tres mil años, pero no sabemos por qué, lo único que sabemos es que el agua que está por todo este lugar es increíble para sanar y curar.

Lex giro su cabeza para ver a su acompañante, el cual estaba quedando completamente desnudo al quitarse toda su ropa, algo que ignoro y su mirada regresó a aquel estanque, aunque noto cierto parecido a algo.

– Que ocurre chico hada?, no me digas que te da vergüenza que alguien te vea desnudo o ver a los demás así?.

Dijo en un tono de burla al referirse a él hada, pero este solo miró como su acompañante metía la mano al agua y todo el agua del estanque comenzaba a brillar y a desprender más poder mágico.

– Es similar al agua de la fuente, pero más poderoso, esto significa que es agua que aquel traidor logró crear.

Dijo mientras retiraba su mano y comenzaba a moverla para que las pequeñas gotas se fueran, su mirada se dirigió a él humano, el cual estaba sorprendido por lo último hecho por el, era tanta su impresión que tardó unos segundos en reaccionar.

– V-valla, nunca vi a nadie hacer eso?.

Dijo con asombro, si que era fácil impresionar a los humanos.

– De hecho nadie más que las hadas pueden hacer algo así, pero solo si otra hada creo naturaleza para poder manipular.

Explicó mientras comenzaba a quitarse la ropa, algo que desconcertó al humano.

– Ahora que haces?.

– Pues me quito la ropa, no por manipular poder mágico, significa que también pueda hacer que mi ropa no se moje.

Dijo, se quito aquella ropa que había hecho con base a las enseñanzas de su hermano, una sudadera con capucha y unos pantalones era lo que vestía, al estar sin nada que lo cubriera se metió en el agua.

– "Es muy lindo".

Pensó al ver a él hada desnudo, su cuerpo pequeño pero con músculos mostrándose en el, su cintura pequeña que sería fácil de cubrir con sus brazos, y su cadera que desde que la vio no logró apartar la vista.

Sintió como "algo" comenzaba a despertar, así que sólo se arrojó al agua, sintiendo paz y tranquilidad.

...

Todos en las calles miraban a aquella persona que no veían en dieciséis años.

Algunos miraban con asombro, otros con miedo y otros con desprecio después de todo, muchos recordaban ese día, el día que ese pecado lo marcó para siempre.

Aquel chico de cabello blanco y ojos rojos el cual alguna vez logró ser el orgullo de el reino, ahora solo era un Simple intruso en el reinó.

– Acaso también vino a matar a otro?.

– Dejalo, nadie más que nosotros sabemos que el no merece la muerte sería darle paz a todos los crímenes que cometio.

Las voces de aquellas personas que algún día lo aclamaron.

– Que patético se ha vuelto, incluso alguien realmente lo podría amar?.

– Ojalá nunca hubiera sido un caballero de Camelot.

Aquellas voces que si tan sólo fuera la mitad de lo que realmente piensan y estarían muertos.

– "Espero me perdones por no lograr protegerlos".

Pensó mientras seguía su camino al castillo de aquel reino, pero al llegar sólo vio como alguien estaba frete a la puerta, manteniendo una sonrisa en su rostro y solo haciendo un leve movimiento de cabeza.

– Lex el cisne de la Traición.

Dijo.

– Merlín, el jabali de la gula.

Sin duda esta reunión sería interesante para ambos, después de todo, ellos sabían más de lo que la jente aparenta.