trece.

1.2K 211 61
                                    

Maratón (2/4)

Llegó arrastrando los pies, desanimada y sintiéndose reprendida. Su estómago dolía levemente y eso la hizo sentarse en el suelo, con la espalda recargada en la piecera de su cama.

Hoshi entró en silencio sin saber qué decir. No escuchó nada, debido a los vidrios gruesos del auto pero por el estado en el que ella se veía, sabía que no resultó como ella esperó.

――¿Necesita hablar?

――Ella tiene razón, no soy más que una egoísta. Lo busqué cuando carecía de amor y hora lo busco para que resuelva mis errores de adolescente. No hago más que usarlo.

――¿Se refiere al Jefe Park? ――Como no respondió él le inspira confianza. ――No se preocupe, no diré nada. Ya me había dado cuenta de que algo sucedía entre los dos.

――¿En serio?

――El Jefe Park es un hombre muy expresivo, hacer ver cuando algo le molesta, incómoda o gusta y tenía cierta mirada de enamorado cada que usted estaba cerca. Además ví lo mal que se puso cuando usted y Chaewong bailaron aquel día después de confirmar su boda.

――No he hecho otra cosa más que herirlo y decepcionarlo, una y otra vez.

――¡Eso no es verdad! Él siempre habla muy orgulloso de usted.

――¿Sabes algo? Cuando estaba con él, me sentía tan libre y viva. Él hacia que los comentarios hirientes de Chaewong dolieran menos, hacia que yo sintiera que era suficiente pero... Arruine todo, eso es lo único que hago.

――Señorita Yaeri...

――Ella solo quiere protegerlo... Protegerlo de mi, ¿Qué tan mal debió verlo para considerarme tan amenazante para él?

Hoshi tenía muchas cosas que decir, pero prefiere prestarle su hombro para que llore a gusto y se desahogue porque bien parece no es lo único que tiene atorado.

El día siguiente no pinto ser mejor, pues Yaeri parecía una muerta en vida, pálida y cansada. Comió, creyendo que eso aliviará el malestar estomacal que tiene pero solo lo atenúa un poco.
――¿Señorita Yaeri? ――Jimin vuelve a repetir y es hasta la quinta en la que ella presta atención. ――¿Desea que le diga que la reunión sea aquí o en la Oficina?

――¿Reunión?

――La reunión con el representante de Louis Vuitton, le acabo de decir que llamaron para adelantar la negociación y acuerdos.

――Oh. ――Intentó hacer memoria pero realmente, no recordaba que mencionara eso. ――Sí, sí, está bien.

――¿Está bien qué? ――Frunce el ceño.

――Uh... Eh, aquí, aquí está bien qué se haga.
――Asintió repetidas veces.――¿A qué hora será?

――Me dijo que lo agendara a las 4.

――¿Ah sí? Pues entonces, ya está. ――Se puso de pie de la mesa y bebió todo el jugo de durazno. Atrás de ella junto a Hoshi la siguió de vuelta a su habitación para ayudarle a preparar lo necesario.
――Em... ――Rasco su nuca un poco despistada.
No recordaba donde había puesto el catálogo de muestra que presentaría.
――Necesito... ――Su celular sonó varias veces viendo, el remitente la puso todavía más nerviosa, pero colgó volviendo a meter el dispositivo dentro de su chaqueta. ――¿Qué estaba buscando?

――¿Se siente bien?

――Sí, sí. Solo... Estoy algo despistada. Nada de que preocuparse.

――Hoshi me dijo que tenía malestar estomacal anoche. ――Ella le da una mirada un tanto enojada al de melena plateada que finge estar contando los mosaicos en el piso. ――Si no se siente bien, debería posponerlo.

the guardian. pjmWhere stories live. Discover now