Percy Jackson Campeón de Caos (Reescribiendo)

Conociendo a Caos

Caos, la primer ser en toda la existencia, tan poderosa como es que creo a todo el universo, se encontraba triste, cansada y aburrida, hace eones que nadie se acordaba de ella o de alguno de los primordiales, en su tiempo fueron seres que gobernaron el cosmos y en lo que en el habitan, pero su tiempo pasó con el pasar de las generaciones, de primordiales a titanes, de titanes a dioses y de dioses a semidioses, casi nadie sabía siquiera su existencia, los únicos que sabían de ella son: los primordiales por supuesto, algunos titanes como Kronos, Hiperion, Helios, Selene y Atlas y por último los dioses que estaban en el concejo; y a pesar de conocerla nunca le rezaron o le hablaron, no es que les daría ayuda a cometer sus atroces actos pero al menos le daría un poco de felicidad el saber que al menos alguien se acordaba de ella.

Puesto que no tenía mucho que hacer, su pasatiempo favorito era ver las distintas líneas del tiempo, su hermano Chronos, primordial del tiempo, fue tan amable con ella, que le permite entretenerse viendo una especie de "¿Qué hubiera pasado si....?" de cualquier ente en el universo, esto también conllevaba el poder influir e interactuar de forma, muy limitada e indirecta en esa línea temporal, su hermano eral el mejor. Sin embargo, esta entidad suprema con el poder de la creación y destrucción.....se hallaba aburrida, ya no le divertía ver las otras líneas temporales, en la mayoría a este ser llamado Percy Jackson, en cada universo siempre era el semidios de la gran profecía, el que salvaba o destruía el olimpo, gran héroe que marcó un antes y un después en la historia, incluso interactuando con otros panteones a pesar que sus nietas, los destinos, hijas de Ananke, primordial de la inevitabilidad y el destino, trataban de impedirlo, pero parecía que este semidiós en cada universo tenía la particularidad de desafiar, aunque sea por un poco, al propio destino, pero lo que más la entristecía era que en ningún universo se acordaban de ella, ni una misera palabra se dirigió a ella, vivía en un constante silencio que muy rara vez era roto por alguno de sus hijos, los primordiales a pesar de tener un espacio propio para ellos nunca estaban por mas de unos míseros 10 minutos a lo mucho solo para saludar, desolada y triste se disponía a irse al vacío, hogar de los primordiales, muchos de los entes sobrenaturales habían creído que su especie había desaparecido, pero lo que ignoraban era que ellos vivían en armonía en un espacio retirado de los universos, el espacio que hay entre ellos para ser exactos, un lugar llamado "el vacío". 

Justo antes de partir a su hogar, dispuesta a darse un merecido descanso de unos cuantos siglos, escuchó una plegaria que sorprendentemente a pesar de que no se dirigía con su nombre en específico, era para ella, le pedían ayuda con mirada de asombro y felicidad abrió un portal de visualización donde vio a un joven Percy caminando sin destino aparente por la carretera desolada, al principio se sorprendió al saber que la persona que le rezó era un niño, pero al momento siguiente su mirada cambió a preocupación al entender quien era este niño, en todas las realidades que había visto Percy siempre estuvo acompañado de su madre hasta la edad de 12 años, pero ahora veía a este Percy de 6 años completamente solo sin ningún arma para defenderse, por unos instantes se preguntó que debería de hacer, normalmente nunca interferiría de forma tan directa, no es porque tenga que seguir reglas como los demás dioses, era más bien por falta de interés, sin embargo este Percy había pedido su ayuda, era la primera persona fuera de los primordiales que le dirigió la palabra en siglos, lo meditó por un rato y llegó a una conclusión, ayudaría a este niño, después de todas las historias alternativas que había visto, se había encariñado con el semidios, además de que aprovecharía y ayudaría a este universo a mantenerse en orden, con un chasquido de dedos una luz apareció rodeando la figura del niño, al siguiente instante se encontró en un palacio muy hermoso, enfrente de el una mujer que lo miraba con mucha ternura y un toque de felicidad

Percy: ¿Quién es usted?

Caos: Mi joven semidios, yo soy caos, primordial del vacío, soberana del cosmos, creadora de este universo