Llegada al inframundo

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Pov Percy

Estábamos de pie en las sombras del Boulevard Valencia, mirando hacia arriba a las letras doradas grabadas en mármol negro: DOA ESTUDIOS DE GRABACIÓN. Debajo, grabado en las puertas de vidrio: NO ABOGADOS, NO VAGANCIA, NO SERES VIVOS; era casi media noche, pero el vestíbulo estaba bien iluminado y lleno de gente, detrás del escritorio de seguridad estaba sentado un guardia de seguridad de mirada dura con lentes de sol y un auricular.

Annabeth: Entonces......¿cual era tu plan?

Percy: Sencillo: primero debemos de hacer que el barquero nos lleve y nos deje lo más cercano del castillo del tío, de algo deben servir los dragmas, Cerbero será un perro monstruoso, pero a final de cuentas, es un perro, si no funcionan los métodos convencionales, siempre puedo inmovilizarlo, avanzamos hasta el castillo, le explicamos la situación a Hades y le ofrecemos encontrar su Yelmo a cambio de que libere a Sally -Se que es un plan muy vago pero, lo único que haremos será explicar y dialogar, no es que vaya a haber lucha -Además si algo sale mal tenemos las perlas

Annabeth: Una vez más, explícame, ¿porqué el no tiene el rayo?

Percy: Las furias vinieron hacia nosotros con la intención de recuperar el yelmo, al tío no le conviene empezar una guerra, el guía a las almas de los muertos, una guerra conllevaría a una sobrepoblación de almas, además que es el abuelo quien organizó todo, por cierto -me acerqué a Grover y me arrodillé hasta los zapatos, extendí mi mano y una luz verde iluminó a los zapatos antes de que se rompiera como cristal

Grover: ¿Pasa algo?

Percy: Nada, no te preocupes, sigamos.

Caminamos hacia dentro del vestíbulo DOA, Mozart sonaba suavemente en los altavoces ocultos, la alfombra y paredes eran gris acero, cactus de lápiz crecían en las esquinas como manos de esqueleto, los muebles eran de cuero negro, y todos los asientos estaban ocupados. Había gente sentada en sofás, gente parada, almas mirando hacia afuera por las ventanas o esperando por el ascensor. Nadie se movía, o hablaba, o hacia mucho de nada y los pocos que me llegaron a ver, se alejaban rápidamente o trataban de arrodillarse, cosa que no podían, supongo que tener nicromancia tenía muchas ventajas. El escritorio del guardia de seguridad era un pódium alzado, así que tuvimos que mirar hacia arriba, Caronte era alto y elegante, con piel chocolate coloreada y cabello rubio blanquecino rapado al estilo militar, el vestía en tonos de carey y un traje de seda italiana que combinaba con su cabello, una rosa negra estaba colgada de su solapa debajo de una etiqueta de nombre plateada.

Percy: Hola mi estimado, ¿podría llevarnos al inframundo?

Caronte nos miró y su boca se torció en una sonrisa

Caronte: Bueno, esto es refrescante, directo y honesto, sin gritar, sin "debe ser un error", ¿cómo murieron entonces?

Le arrojé 3 dragmas, el las agarró y nos miró con extrañeza pero sabía que tenía una idea de lo que sucedía

Percy: Sabes tan bien como nosotros que no estamos muertos, estamos aquí para pagarte un viaje al inframundo

Caronte: Eres un diosecillo -hizo un sonido de gruñir profundo con su garganta, inmediatamente toda la gente en la habitación de espera se paro y empezaron a andar, agitados, prendiendo cigarrillos, corriendo las manos a través de su cabello, o chequeando sus relojes de pulsera, con solo alzar mi mano en señal de alto, se detuvieron, Caronte me miró con extrañeza pero lo dejo pasar -Váyanse mientras puedan, yo solo tomaré estas y olvidare que los vi

Percy: Lastima -saqué una pequeña bolsita con los dragmas que nos dió amablemente Ares -y yo que quería darte tan generosamente esto

Caronte: ¿Crees que puedes comprarme?

Percy Jackson Campeón de Caos (Reescribiendo)Opowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz