La inocencia de un chico [ Kookmin ]

15.

"¿Por qué tantas llamadas perdidas?" Pensó. Vio la hora, eran las 10:08pm. Entonces fue cuando todo le cayó como un balde de agua fría.

La fiesta de cumpleaños de Hoseok era esta noche, y le había prometido a Jimin que estaría allí.

—Idiota —se dijo así mismo —, idiota ¡Idiota y más idiota!

Desconectó con agilidad el cargador sin mirar la batería y se dirigió al cuarto de Joshua para entregárselo.

—Chicos, debo irme ahora —avisó tomando su mochila —. Joshua, muchas gracias por el cable. Nos vemos mañana, adiós.

Sin escuchar a los demás, salió directo a la casa de Hoseok. A esa hora no había taxi alguno pasando por los alrededores, el clima estaba levemente calmado, pero seguía lloviendo y no estaba cerca de la casa de los hermanos Kim.

—Imbécil. —volvió a insultarse.

Sin pensarlo mucho, acomodó su abrigo y comenzó a correr, talvez de esa manera lograría llegar cuanto antes. No le importó si se mojaba, si se iba a refriar, mucho menos le importó el calambre que sus piernas estaban experimentando metros más adelante al ser utilizadas de forma bruscas.

Debía llegar como sea.

Al cabo de algunos minutos logró llegar a la esquina de la casa de sus amigos, minutos que le parecieron un infierno. Su corazón latía a una gran velocidad y ardía mucho, el solo hecho de pensar que su Jimin lo estaba esperando y no cumplió su palabra lo quemaba por dentro.

Con la respiración agitada, las piernas palpitando y totalmente empapado comenzó a caminar hacia la casa, pasó al lado de una chica que se encontraba esperando a que la lluvia bajara debajo de una carpa, el perfume de ella era demasiado fuerte que consiguió asquearlo y toser, pero no paró hasta llegar a la puerta de la casa.

No vio a nadie que lo pudiera atender, así que entró con cuidado para no ser regañado ni nada de eso. Quitó sus zapatos para no ensuciar el suelo y en la mitad de la sala se encontró con los hermanos Kim mirando al jardín desde la ventana debido a la lluvia.

Se acercó a ellos sin dudar.

—¡Chicos! Por Dios, lamento haber llegado tan tard...

Sus disculpas quedaron en su boca tras recibir un puño de Taehyung en la cara, quien apenas escuchó su voz se giró hacia él, dejándolo en el piso. Jungkook llevó su mano para sobarse en el lugar golpeado y miró confundido al chico.

—"Lamento llegar tarde" Si no querías venir, si se te olvidó o cualquier cosa ¡simplemente debías llamar y ya está! ¿Sabes cuanto te esperó Jimin? ¡Más de dos horas! —gritó enojado —¿Ves ese rincón? —lo señaló —Ahí... ¡Ahí se quedó todo el tiempo esperando porque pasaras por esa maldita puerta, pero no! Al parecer el joven Jeon tenías cosas muchísimos más importantes que hacer.