Capítulo 10

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¿Cuándo volverán los amantes prófugos? Llevan casi más de una semana desaparecidos. ¿Es eso buena señal? Espero que sí.

Lástima para nosotros si deciden no celebrar una boda digna de un Marqués.

Pensé que sería aburrido tener que esperar una nueva temporada para derramar chismes por todo Londres, pero veo que ha sido todo lo contrario, y como siempre, los protagonistas son nuestros libertinos más aclamados.

Revista de sociedad de Lady Kennt.

Lord Leonardo no podía apartar los ojos de su esposa mientras ella dormía plácidamente sobre su pecho, él acariciaba suavemente su espalda desnuda, se deleitaba con su suave piel, durante todos esos días no había podido mantenerse apartado de ella, cada vez que estaban solos en la habitación de la pequeña posada era inevitable no hacerle el amor, y como negarse a tan apasionado momento, y más cuando su esposa era tan entregada al momento de tener sexo, es como si ella fuera una maestra y él su alumno, cuando debería de ser todo lo contrario.

A estas alturas ya no recordaba el verdadero motivo por el cual había aceptado casarse con Katherine. Recordó cuando su padre, el Sr. Walter, le hizo la propuesta, era demasiado generosa para declinarla, además de su principal objetivo, obtener una deliciosa venganza por lo que su prima  le había hecho en el pasado. Pero ahora, no quería ni pensar en eso, únicamente tenía mente para pensar en su esposa y en hacerla feliz. No sabía cómo ella había logrado cazarlo tan rápidamente.

Y es irónico: De cazador pasó a ser la presa.

Ahora solamente tenía que asegurarse de que Kate no supiera los verdaderos motivos, por lo que había aceptado una boda con ella.

Leo sintió los suaves movimientos de su esposa, lo que le indicó que ya había despertado. Una sonrisa iluminó su rostro cuando ella lo miró somnolienta, ese sería un momento perfecto para volver a hacerle el amor, pero se contendría por un rato.

—Deberíamos regresar a Londres — dijo ella dando un corto bostezo y volviendo a recostar su cabeza sobre el pecho desnudo de su esposo.

—¿Tan rápido quieres deshacerte de mí? — preguntó Leo mirándola desde arriba.

—Sabes que no, y ya no puedo deshacerme de ti, ahora eres mi esposo — respondió ella subiendo un poco más para poder besar sus labios —. Pero ya hemos pasado casi una semana aquí, nuestros padres deben de estar preocupados.

—Ellos saben que estás conmigo.

—A estas alturas todo Londres debe saber que estamos aquí — dijo ella y Leo tuvo que rodar los ojos.

No querias lastimarme (Saga #3 Amores Encadenados)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora