17. Simulando

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Sabado 31 de agosto

-Emma-

Era hora de poner en marcha el plan de los chicos, para eso tuve que levantarme temprano para buscar a la casa de video la cinta que grabé, se trataba del audio de la llamada con Tommy, dónde él solito exponía su infidelidad.

Nuestra idea era que yo lo invite a una "cena de bienvenida" en pareja, solo nosotros. Le pedí como favor al gerente del restaurante que en un momento determinado de la noche ponga el proyector y se reproduzca un video, a lo que accedió, ya que iba a tener prensa para poder hacer famoso al restaurante luego de la humillación que iba a sufrir Tom.

El plan era una locura, me reiría tanto de él.

(*)

Pasado el mediodía nos dirigimos en grupo al aeropuerto para recibir a la banda. Llegamos justo cuando estaban bajando por las escaleras con un par de guardaespaldas cargados de maletas. En ese preciso momento debía comenzar mi actuación de novia perdidamente enamorada que extrañaba muchísimo a su hermoso novio.

-Heyyy ¿Cómo esta mi princesa luego de tanto?- me preguntó con muchas ansias abrazandome con muchas fuerzas. En mi mente mi respuesta ideal hubiera sido darle una patada justo en las bolas mientras lo meaba por lo falso de mierda que era, por desgracia eso me llevaría a una demanda legal por su parte y no podríamos llevar a cabo el increíble plan.

-Triste por estar tanto tiempo sin tí- hice una asquerosa mueca de tristeza como si fuera un bebé y le devolví el abrazo acariciando su espalda- esta noche saldremos a comer juntos, solos, si o si no se vale rechazar mi propuesta.

-Obviamente sí, no podría negarte nada con esa cara que pones, te extrañé- me besó la frente y salimos todos juntos del aeropuerto.

Saludé a Mick con un gran abarazo, a se viejo si que lo quería con ganas, era como un segundo padre amargo para mí. Nick y Vince estaban bastante perdidos así que decidí no acercarme a ellos por ahora. Sixx me preocupaba, llevaba unos moretones bastante violetas en el ante brazo, la droga lo estaba consumiendo de a poco.

Intercambié miradas de complicidad con Jeff, al cual se le escapó una risa traviesa como la de un niño. Levanté el pulgar en afirmación a que el plan iba bien.

(*)

Llegamos a la casa nueva de los Motley, esta era mucho más decente que la anterior, se notaba que les iba bien por ahora. Subimos el equipaje por las escaleras y cada uno de los integrantes se dedicó a ordenar sus cosas, los Guns se quedaron en la sala mirando la tele un rato. Yo como la dulce y dedicada novia que era me encontraba ayudando a Thomas a organizar su habitación.

Guardé las pocas camisetas que no tenían olor feo en un cajón, al igual que algunos pantalones y calzoncillos. Ignoré la poca discresión con la que había guardado una caja abierta de condones a medio usar y la puse al fondo de la maleta para que piense que como soy media estúpida no la ví.

Más de la mitad de las cosas fueron a parar directamente al lavaropas, necesitaban hasta una desinfección con todo tipo de químicos si se pudiera hacer. Los brazos de mi "novio" recorrieron mi cintura por detrás mientras empezaba a depositar ligeros besos por mi cuello.

No puedo negar que eso es mi debilidad y me derretía bajo su cuerpo, pero la impotencia que sentía por dentro le ganaba por completo a mis hormonas.

-Ahora no, todos estan por la casa, nos oirán- me excusé soltandome de su agarre.

-En estos momentos es lo que menos me importa amor, hace mucho que vengo deseando tus besos...- me dió vuelta para quedar cara a cara-...tu cuerpo...- tomó mi trasero como si fuera de goma y lo apretó-...tu hermoso aroma...- estaba negada a coger con él, podía tener cualquier tipo de enfermedad con la cantidad de chicas que se había acostado, pero más que nada porque me daba asco pensar en hacerlo. La única alternativa que tenía era hacerle un oral, obviamente con un condón, era preferible hacer eso antes que lo otro.

-Entonces te daré la bienvenida como te mereces- tomé uno de los preservativos que estaban debajo de la maleta y se lo mostré con picardía, de inmediato se formó una sonrisa en sus labios.

Luego de que me besara descaradamente tomé el botón de su pantalón, lo desabroché y se lo quité. Até mi pelo con una liga mientras me ponía de rodillas, haciéndo contacto visual con él en todo momento. Bajé sus boxers hasta los tobillos y coloqué con cuidado el preservativo. Hice lo que tenía que hacer para no levantar sospechas y que todo salga bien...

White Boy// IZZY STRADLINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora