Capítulo 69.

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Narra Amber.

Despierto adolorida en todo mi cuerpo, intento levantarme, pero me es difícil.

Miro a mi alrededor y no se encuentra Cain.

El recuerdo de ayer, en la playa, cuando decia que estaba enamorado de mi, sigue pagando en mi mente y se repite constantemente, sin poder creerlo todavía.

Pienso que mi mente quizo jugar conmigo y me hizo soñar sobre esa declaración del hombre más obstinado, desinteresado y de quién me utilizo al principio... Aunque siendo justos, yo también lo he utilizado, así que es en parte y parte.

Pero, el dolor corporal, de las embestidas anoche y las marcas de beso en mi cuello, me demuestra que no estoy en un sueño.

Lo más sorprendente, es que yo correspondi... Definitivamente estar en Estados Unidos y con esta familia me ha afectado.

Termino de levantarme, lavo mi rostro, me cambio y salgo de la habitación, bajo las escaleras y escucho ruido que proviene de abajo.

- los dos, a comer y luego siguen jugando - la voz de Caín.

- ya vamos papá

Termino de bajar y entró a la cocina, huele bien

- ya despertaste - me dice Alessia.

- si, me duele un poco el cuerpo

- es normal, hace nada tuviste ese incidente y no terminas de sanar - dice Cain mientras sirve el desayuno

- lo sé, pero esto no es nada - me siento y me sirve la comida, panquecas.

El desayuno avanza con calma, terminamos y vamos a la sala.

- vamos al cine - dice Alessia de la nada.

- si - los niños gritan al mismo tiempo

Caín está concentrado en su laptop

- es arriesgado, no - con severidad concluye

- vayamos, los niños necesitan ir a otro sitio

- dije no

- anda papá - insiste Nadia

- creo que es una buena idea para los niños - intervengo, el levanta la mirada de su computadora y me observa, luego a los niños que se encuentran haciendo pucheros.

Suspira - está bien, vamos

- yeii - celebran los niños y Alessia

- pero...

- ay no - dice Alessia

- reglas, la primera es que no se pueden alejar de mi, segundo no corran por todos lados, tercero harán caso - coloca esas reglas enumerando con sus dedos.

- bien

- vayan a cambiarse - cierra la laptop y levanta en sus brazos a Mikha

Nos levantamos y nos cambiamos, algo discreto.

Me coloque una camisa negra, blue jeans azules rotos y zapatos deportivos.

Salgo y ato mi cabello en una cola baja.

- listos? - pregunta Caín en brazos con el pequeño y de la otra mano a Nadia.

- falta Alessia

- como siempre, tarde

- deja de hablar de mi, ya estoy lista - termina de bajar y salimos de la casa

Llegamos al centro comercial, Alessia lleva a los niños de la mano, voy atrás de ellos. Caín empieza a deshacelerar su paso hasta quedar a mi par.

irresistible destrucción Where stories live. Discover now