Capítulo 11

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Narra Alessia.

Siento la cama hundirse, por reflejo me levanto de golpe, saco mi arma debajo de mi cama y apunto.

- joder Alessia - se levanta Kaled de golpe.

Levanta las manos

- por qué entras así?

Reprochó

- tenía que hacerlo, o acaso querías que Caín me viera?

Bajo el arma y me relajo lo más que puedo, dejo el arma en la mesa de noche.

Paso mis manos por mi cabello, veo el reloj.

8 de la mañana.

- que haces aquí a esta hora?

El se siente y sonríe.

- ayer no nos cruzamos mucho

- ajá

Se acerca a mi.

- te deseo

Intenta besarme pero lo apartó

- idiota caín puede entrar y vernos - miro hacia la puerta

- Alessia tranque la puerta por quién me tomas - dice frunciendo el ceño.

- sabes que en el día no es conveniente

- hasta cuándo vamos a seguir ocultandonos de caín? - pregunta irritado

- a qué viene esa pregunta??

- tenemos casi un año follando Alessia

- eso no significa que tengamos una relación

Veo que se tensa

- eres una perra

Se levanta.

Sonrió

- no soy una perra, tu mal interpretaste las cosas, tu y yo no tenemos nada Kaled. Es solo sexo clandestino y ya, son solo ganas - le digo - además vamos a estar claros que tú también has tenido sexo con más mujeres.

El suspira.

- Caín necesita que vayas de espía a donde los policías - dice evadiendo el tema

Me levanto

- para?

- sabes que el es muy precavido, no le agrado que un policía estuviera merodeando en el puerto

- me imagino

- ya sabes que hacer, se oídos en ese lugar - y sale

Suspiró, voy al baño, me veo al espejo y empiezo a cepillarme, preparo la bañera, quiero relajarme

Entro y dejo que el agua calme mi cuerpo.

Terminó de salir y busco que ponerme.

listo.

Salgo con las llaves de mi auto a la mano.

Veo en el fondo a Will parado como un soldado, camino en esa dirección

- aparta - le digo

- señorita...

- es una orden

Will se aparta y yo entro.

Veo a Amber sentada en la punta de la cama mirando a la nada.

- párate, báñate y arréglate.

Ella me ve

- para que?

- de seguro mi hermano volverá a necesitarte así que cuando el vengas que vea que ya estás lista.

irresistible destrucción Where stories live. Discover now