The Price of Loving You [Vegaspete]

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Pete hablaba por teléfono con su madre mientras se preparaba para tomar un baño, en los últimos días había estado tan estresado y solo quería relajarse un poco aunque dentro de poco tenía que ir a su empresa.

Su madre le contaba sobre las cosas que había estado haciendo y sólo la escuchaba atentamente porque sonaba muy entusiasmada, estaba tan concentrado que no escuchó cuando la puerta de su habitación se abrió solo sintió los brazos de su marido rodearlo y una lengua traviesa pasarse por su cuello.

Cerró los ojos y apretó sus labios, maldito, como se le ocurría hacer eso justo cuando hablaba con la persona que le dió la vida.

Pete: Mamá tengo que dejarte ¿Si? Te veré uno de estos días.

Apenas escuchó la afirmación de su madre colgó la llamada y volteó para mirar mal a Vegas quien tenía una sonrisa en su rostro.

— ¿Te parece gracioso?— Le dió un golpesito — Ya vete porque tengo que darme un baño.

— Vamos a darnos un baño — Lo jaló hacia él y dejó pequeños besos en sus mejillas— ¿Cómo está tu madre?

— Ella está bien — Se separó levemente — Estoy hablando enserio cuando digo que tengo que bañarme.

— Yo también — Le dió una palmada en su trasero y lo tomó de la muñeca llevándolo a la ducha.

Pete no volvió a protestar solo se sacó la ropa frente a la atenta mirada de su esposo, minutos más tarde Vegas estaba totalmente desnudo.

— Deja de mirarme así, me das miedo — Soltó una risita mientras abría la llave de la ducha.

— Así como — Pasó uno de sus brazos por su cintura — ¿Miedo de qué? ¿De qué pueda comerte? — Susurró sobre los labios ajenos.

— Puede ser — Le siguió el juego — Pero tienes permiso de hacerlo.

Vegas besó lentamente la boca de Pete, explorando y jugando con la lengua contraria, sus manos se paseaban por la cintura del menor y luego bajó hasta apretar suavemente sus nalgas.

El cuerpo de Pete se pegó hacia la pared, jadeó cuando las manos de su marido abrieron su trasero y sus dedos jugaron con su entrada.

— Mmm — Sus brazos rodearon su cuello — ¿Qué crees qué haces?.

— Prepararte para follarte — Dejó un besito en su frente y metió sus dedos uno por uno.

— ¡Ah! — Su cuerpo había despertado apenas Vegas pasó su lengua por su cuello y ahora sí necesitaba que este lo jodiera tanto como pudiera — V-vamos a llegar tarde al trabajo.

— No es importante — Siguió moviendo sus dedos mientras sus labios se deleitaban con la piel suave de su esposo — ¿Crees qué me importa el trabajo cuando estoy duro y necesitado de tu cuerpo?

— Por favor — Susurró con voz aguda — También te necesito.

En un movimiento rápido Vegas volteó a Pete, este pegó su rostro a la fría pared y arqueó su espalda dejándose dominar una vez más por su marido.

Las manos de Vegas recorrieron su espalda bajando hasta sus nalgas, palmeó sin ningún cuidado dejándolo con un color rojizo. Tomó su miembro entre sus manos y lo masturbó durante unos segundos, el presemen goteaba así que dejó caer algunas gotas en las nalgas del menor.

Acomodó la punta en su entrada y cepilló despacio, el cuerpo de Pete se estremeció ante ese movimiento tan descarado.

— Mmm — Mordió su labio y movió sus caderas en busca de más contacto — Vegas.