One Shot's Anime +18

Show de Magia [Hisoka - HxH]

Anime : Hunter X Hunter
Hisoka x lectora
Universo alterno
Romance, Smut, Lemon

Era una noche fría, y como cada miércoles solitario, me vestía y arreglaba para salir. Hace unas semanas un buen amigo mío me había invitado a un espectáculo de magia, y la verdad quede impactada, jamás había ido a un espectáculo de magia, y como Gon me dijo, parecía una niña pequeña, estaba bastante sorprendida por las ilusiones que ocurrían frente a mis ojos. El teatro no era muy grande, tenía un vestíbulo muy moderno con unas puertas amplias de vidrio, al fondo de este estaba la boletería, que contrastaba bastante con este moderno espacio, era muy tradicional, de madera con forma cilíndrica en el centro, a cada lado de esta, dos puertas rojas que llevaban al teatro. En este cabían unas cien o ciento cincuenta personas, no era muy grande, el escenario era estrecho y pequeño, pero suficiente para un espectáculo de magia, supongo.

Debo admitir que a mis veintisiete años pensaba que era bastante sencillo ver las jugarretas de los magos, pensé ingenuamente que me seria sencillo adivinar el truco detrás de la magia. Pero aquel mago no era uno típico, salió vestido de Arlequín, con una polera sin mangas que dejaba ver sus fornidos brazos a la perfección, la polera era negra con un símbolo de rombo y uno de corazón de color rojo, como en las cartas. Esta era corta, apenas cubría sus pectorales, bajo esta una malla de color rojizo. Sus pantalones eran sueltos de un color blanco, llegaban hasta su pantorrilla donde se apegaban a su pierna hasta el tobillo, por último, sus zapatos eran los típicos que terminan en punta de color negro.

Sinceramente, era muy bueno, realizo varios trucos de cartas que no pude explicar, luego algunos con unas pequeñas pelotas de gomas y vasos, y ninguno puse adivinar como lo hacía, no tenía mangas donde esconder las cartas o pelotas, realmente parecía que los sacaba de la nada. Aquel hábil mago me había dejado atónita, y no solo por el juego de manos y cartas.

Casi terminando la noche el mago pidió un voluntario, yo soy bastante vergonzosa y no quería ser parte de esto, pero Gon salto a mi lado y apunto a mi dirección, llamando totalmente la atención de aquel mago formidable. Él se acercó con un elegante caminar me miro y sonrió, bajo las escaleras del escenario y tendió su mano, mirándolo fijamente a los ojos dorados, me apoye en su mano y me deje guiar por él.

Su mano era cálida, delgada pero fuerte, al más mínimo toque de su piel junto a la mía sentí aquel hormigueo. Subimos hasta el escenario y mirándome fijamente a los ojos comenzó a explicarme el procedimiento.

–Te colocare este collar en tu cuello– más que un collar era como un artefacto grande y redondo que cubriría todo mi cuelo, en la parte de frente y de atrás tenía un pequeño espacio vertical – este te protegerá, Pero yo atravesare tu garganta con esta espada– No sé en qué momento la agarro, pero en su mano tenía una espada de aproximadamente un metro. Se veía afilada y peligrosa, la solo idea de que atravesaría mi garganta me hizo quedarme absolutamente quieta – No dejare que nada te ocurra, ¿Okey? – me dice casi en un susurro.

–Okey– le respondí, no lo conocía y ya le estaba entregando mi vida. Bueno, era solo un truco verdad, ¿verdad?

Comenzó a presentar el truco mientras acercaba la punta de la espada a mi cuello, el me mirada a los ojos y yo me perdía en el oro de su mirada. Por un pequeño segundo su mirada no solo se tensó, si no que se volvió oscura y maliciosa, pude sentir el miedo recorrer todo mi cuerpo mientras veía como con gozo enterraba la espada a través de mi cuello.

El público estaba en silencio, solo se logró escuchar el filo de la espada chocando con el borde de metal del collar. Cuando la espada atravesó por completo mi garganta el silencio se quedó por unos segundos, yo del miedo cerré los ojos, pero apenas lo abrí vi como el público le aplaudía mientras el extendía los brazos al cielo, intercalando el gesto con pequeñas referencias. Posterior mente el telón callo frente a nosotros. El sonido de los aplausos aún se escuchaba, pero lentamente comenzaba a disminuir.