LA ROSA DE GUADALUPE NO HIZO EL MILAGRO ESTA VEZ

1.9K 205 97
                                    

Christopher

Decir que me siento inconforme por tener que partir dentro de poco seria blasfemia, realmente me siento decepcionado y otro sentimiento que no logro identificar yace dentro de mi.

No pude convencerla de venir conmigo.

Muy pocas veces soy capaz de aceptar y admitir mis sentimientos y lo que hizo Rachel conmigo fue una revolución, llegó a mi vida y me jodió de tal manera que ahora estoy dudando sobre irme. Nunca pasó por mi mente dejar mis planes y menos por una mujer, pero Rachel lo vale. Pienso en lo bueno que sería quedarme y seguir disfrutando de su compañía.

Me pidió quince minutos, ese mismo tiempo lo uso para pensar y reflexionar sobre mi decisión y las consecuencias que podría traer el quedarme en esta central. A Alex no le gustaría y mucho menos a los encargados de la central de Rusia.

A la mierda todos.

Abro mi computador dispuesto a redactar una carta donde se aclare que no iré a ninguna parte. Empiezo a teclear rápidamente pero un sonido en la puerta hace que pierda la concentración.

—Tienes que partir. ¡Ya!—Grita Alex.

Entra a mi oficina con nerviosismo y agitación.

—¿Qué pasa?—Pregunto.

Me levanto rápidamente al verlo tan alterado.

—La central de Rusia recibió una advertencia. Serán atacados si no hacen lo que piden.

—¿Lo que piden quienes?—Pregunto.

—Ilenko Romanov junto con los Petrova estan enojados por la captura de Antoni Maschenaro.

Maldita sea.

—Te necesitan lo antes posible—Dice.

—Con respecto a eso...—Intento decir

—No es una sugerencia Christopher, necesitas irte ya.

Miro la puerta con una leve esperanza de que cierta persona entre.

—¡Muevete!—Grita Alex.

Observo el reloj y aún faltan cinco minutos para los quince que me pidió Rachel y en un leve intento de hacer más tiempo y poder despedirme recojo lentamente algunas cosas. Alex me mira con enojo e impaciencia y luego de cinco minutos exactos vuelvo a observar la puerta y tengo el mismo resultado.

Rachel no va a aparecer.

La rabia empieza a correr por mi sistema y en menos pocos segundos mi chip de adolescente enamorado cambia a modo militar y me olvidó de la persona que me prometió venir y nunca llegó.

Salgo de la oficina siguiendo a Alex quien, en su desespero, dice que irá conmigo y Rick James a apoyar.

—El avión ya está listo para irnos.

Asiento.

—¿Cuánto tiempo tenemos?

—No lo sé, dieron quince horas para obedecer.

—Esa es una estupidez.

—Lo sé, solo nos darán tiempo para planear una estrategia.

—¿Cuál es el objetivo?

—Vamos a matar a esos malditos.

Una sonrisa se dibuja en mi cara mientras salimos de la central al aeropuerto donde abordaré el avión que me llevará al lugar del cual nunca debí salir.


Rachel.

¿Se fue?

¿Por qué se fue?

FANFIC: CHRISCHEL TU PATRON Nơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ