14. Jamás soltaría tu mano.

79 12 21
                                    

— ¿Puedo tomarte de la mano? — Zack me pregunta camino al patio principal.

Bajo la mirada y sonrío.

— Sí. — Murmuro.

Entrelaza sus dedos con los míos y luego acerca mi mano a sus labios para besar mis nudillos.

— Estas son las manos más suaves que he tocado. — Susurra.

Suelto una risita y detengo mi caminata.

Zack imita mi acción. 

Me paro de puntillas y beso su mejilla en un acto rápido.

— Deberíamos caminar más rápido. — Comento desviando el tema. 

— Si me das otro beso tal vez lo considere. — Sonríe de lado.

— Zack Miller, eres demasiado caprichoso y no deberías acostumbrarte a esto. — Lo beso nuevamente. 

— Lo has dicho muy tarde, porque ya no puedo vivir sin estos besos. — Pone su mano libre en mi cintura y me jala hacia él.

— Nos verán. — Advierto.

Ríe con voz ronca.

Me voy a derretir si continua haciendo eso.

— Que nos vean. — Comenta. — Ya deberían saber que me gustas tanto que no puedo ocultarlo...ya no más.

— ¿Lo ocultabas? — Pregunto con diversión y entrelazo mis brazos alrededor de su cuello.

— Puede ser. — Me da un beso corto. — Pero ya no lo haré.

Me alza del suelo y gira sobre sus pies.

Me rio y luego me baja.

— Vamos. — Esta vez soy yo quien lo toma de la mano y comienzo a correr hasta el patio.

Todos están allí y antes de que entremos en su campo de visión, Zack se detiene.

— Si no quieres que los demás sepan sobre...nosotros, sólo dímelo y soltaré tu mano. No me importa fingir que aún te miro en silencio y deseo hablarte, o que me gustaría protegerte cuando alguien te va a lastimar. — Pone un mechón de cabello detrás de mi oreja y sonríe con cierta nostalgia.

Sonrío de lado.

— Jamás soltaría tu mano. — Digo casi por inercia y un pequeño recuerdo llega a mi mente. 

**— ¿Cómo sé que puedo confiar en ti?

— Porque jamás soltaría tu mano. — Zack Miller me mira a los ojos.

— ¿Por qué? — Sollozo.

Mi amiga fue maltratada por los amigos de Zack, pero él parece querer ayudarme.

¿Debería confiar?

— Yo nunca te encerraría en este closet y mucho menos, quisiera que...lloraras. — Limpia mis lágrimas y luego me ofrece su mano.

— ¿Si salgo de aquí veré...a mi amiga muerta? — Mis labios tiemblan y el gesto de Zack se tensa.

¿Me confirmará lo que tanto temo? 

— Ella estará bien...— Tomo su mano antes de que termine de hablar. — ...y tú te desmayaste aquí. 

Me ayuda a salir del closet y evito mirar al suelo, aunque en la pared se encuentra la huella ensangrentada de una mano.

El club de los cupidos negros [✓] - Las flechas de Cupido #1Where stories live. Discover now