Haikyuu X Tú

Nishinoya

Cuando ___ conoció a Nishinoya, no pudo evitar pensar que era extremadamente amable.

Se encontraron por casualidad en Italia mientras viajaban por el mundo.

Fue una pequeña coincidencia.

Un pequeño desvío.

Y a pesar de eso, su corazón se engancho con el de él.

¿Qué hacer cuando ves a alguien por una milésima de segundo, pero presientes que podría ser el amor de tu vida?

Su primera intención era quedarse dos semanas en Italia. Estás pronto se alargaron a un mes.

-___.-(le habló el joven de veintidós años)-¿Soy el único que cuando te ve siente que el corazón le va a explotar de la emoción?

___ lo miró con una sonrisa triste antes de abrazarlo con fuerza.

Eran grandes amigos.

Se comprendían.

Se querían.

-Me voy a visitar Finlandia una temporada.-(informó con la voz entrecortada)-Te extrañaré mucho.

Noya aceptó el abrazo gustoso antes de soltar una risita encantadora.

-¿Finlandia?-(cuestionó con una sonrisa)-Parece que mi memoria estaba un poco equivocada. ¿Te dije que ahora iba a España? Mi agenda dice que pronto iré a Finlandia. Y puede que de casualidad haya escogido el mismo hotel que tú.

___ usualmente se consideraba alguien tranquila, sin embargo, en ese preciso instante dió un gran grito de alegría.

Su relación aun estaba lejos de acabar.

Unos tres años después, los jóvenes se encontraron aterrizando en Japón.

Asahi, Daichi, Sugawara y Tanaka los esperaban en el aeropuerto.

Ellos estaban concientes de que que su amigo se había enamorado perdidamente mientras viajaba, pero casi se les cayeron los ojos cuando los vieron acercarse.

Primera gran sorpresa.

___ era la chica más hermosa que habían visto. Tanaka, que se negaba a mirar a cualquier otra mujer que no fuera su amada Shimizu, tuvo que admitirlo en su interior.

Segunda gran sorpresa.

Venían con un bebé.

Sugawara quiso pensar que era su sobrino, primo, hermano o lo que fuera. Pero el parecido con el antiguo libero del Karasuno no le permitía darse esa libertad.

-¡¿Un bebé?!-(gritó Daichi sorprendido)-¿Por qué no nos lo dijiste?

-Sorpresa.-(contestó con una sonrisa burlona Nishinoya)-Cada día pareces más serio Daichi-san.

-Un bebé.....ni siquiera están casados. ¿Sus padres los saben? Espero que no los maten. Un bebé a los veintitrés....-(susurró Asahi con preocupación)

Tanaka fue el primero en recomponerse y partió a abrazar a su viejo amigo.

-¡Eres todo un caso Noya-san!-(exclamó con Ian gran sonrisa el rapado)-Mira que tener un hijo. Solo tu podrías con algo así sin morirte del miedo.

Nishinoya le lanzó una mirada cómplice a ___ y ella le sonrió en respuesta.

Cuando se miraban a los ojos, era como si el resto del mundo desapareciera por un instante.

Los antiguos compañeros del muchacho estaban un poco confundidos. ¿Así amaban los extranjeros? Parecían tan cercanos, tan íntimos, tan.....poco japoneses.

Ellos tenían mucho recato con respecto al contacto físico hacia su pareja.

Por eso les eran tan peculiares las miraditas que se lanzaban en público, además de que estaban tomados de la mano mientras Noya llevaban al pequeño bebé en su otro brazo.

-Yo también quiero irme de viaje.-(concluyó Sugawara con un suspiro de anhelo)

Sus compañeros asintieron en acuerdo.

Cuando se separaron, ___ y Nishinoya fueron a la casa del abuelo de este último.

-Una muchacha en verdad bella.-(reconoció orgulloso)- Aunque le falta busto.

El joven frunció el ceño molesto.

-Su apariencia es más que perfecta.-(declaró antes de bufar)-Mientras me fui perdiste el gusto viejo.

El hombre alzó las cejas curioso. Su nieto de verdad estaba enamorado de ___. Su estúpido y cobarde nieto, se había enamorado y tenía un hijo. Eso sí que era un gran paso para él.

Cuando estuvieron solos en la habitación de su antiguo hogar, Noya se acercó y abrazó a ___ por la espalda.

Ella acarició sus brazos con suavidad.

-¿Extrañabas tu hogar?-(cuestionó con una sonrisa la joven)

-No sé de qué me estás hablando.-(repuso el con desinterés, mucho más enfocado en el cálido contacto con su pareja)-Yo nunca deje mi hogar.

-¿Es algo así como que tu hogar está donde quiera que vas?-

-Mi hogar está donde sea que estás tú.-(fue la respuesta que le entregó)

___ se giró para envolverlo en un abrazo.

-Siempre dices cosas muy amables.-(murmuró con cariño)-Me haces sentir muy querida. Yo también te quiero. Aunque no sea tan buena demostrándolo. Yo en serio te amo, Yuu.

Él se acercó y le dió un beso en la frente.

-Te conozco lo suficiente para saber que eres la mujer de mejor corazón....la más bella....la más amable.-(replicó él con seguridad)-No me pidas que te encuentre un defecto. Me veo más que incapaz de decir algo malo de ti. Siempre me mimas, me cuidas. Tú también haces que me sienta amado.

Ella asintió en silencio mientras se enfocaba en la respiración de su contrario.

Así se quedó dormida.

En lo brazos del hombre que la amaba y al cuál ella correspondía con toda su alma y corazón.

Nota de autora

¿Qué tal la vida, queridos lectores?

Espero que les haya gustado el capítulo y esperen el siguiente.

Un pequeño adelanto. Es de Kenma. Hace tiempo que no aparece, lo tengo medio descuidado.

Espero que se cuiden y estén bien.

¡Nos leemos luego!