el fabricante de perlas

El laureado

Cuando llegue al barrio chino tenía una gran vida las luces decorativas de la calle estaban destellantes  igual que los faroles que resplandecían en las vitrinas de los restaurantes donde la música de un local se mezclaba con la música del local contiguo
Parecía inimaginable que una parte de la ciudad durmiera mientras que otra estaba realmente avivada mi corazón latía fuertemente esperando que la tienda estuviera abierta y deslumbrante con sus luces doradas y rojas, y,! sí que estaba abierta !,desde lejos la pude ver y mi rostro se iluminó.
Empujé la puerta con cierta familiaridad y llamé a Lao Zhang, sin atreverme a entrar, pero nadie me contestó
Sin embargo como la vez anterior vi que la puerta del fondo estaba entreabierta así que decidí pasar esperando encontrar allí a mi amigo Lao Zhang
Ya en el interior la habitación presentaba la misma apariencia esplendorosa que la vez anterior pero no había nadie, entonces comencé a tener cierto desánimo, hasta que vi que la caja antigua continuaba en el centro de la mesa !era la caja de las perlas mágicas diseñadas para mí!
Asumí que tenía derecho de coger una porque me pertenecían
Pausadamente me acerqué y la abrí y efectivamente allí estaban las perlas
A ciencia cierta no sabía cuál escoger entonces cerré los ojos y metí mi regordeta mano y así una preciosa perla de tonos anaranjados, luego la introduje dentro de una cajita que había traído y me la guardé en el bolsillo a continuación salí de la prodigiosa tienda dando gracias a todo cuanto estaba a mi alrededor
en el camino de vuelta la perla tintineaba dentro de la cajita que tenía en el bolsillo con la misma fuerza que tintineaba mi corazón
al llegar a casa entré por la puerta trasera del patio donde tenía la bicicleta entonces metí mi mano en el bolsillo y saqué la perla de la cajita! Era preciosa!
La puse sobre la palma de mi mano y tras apretarla con fuerza deseé efusivamente ser un diestro ciclista con un gran dominio de la bicicleta y por ello poder participar en la carrera del día siguiente
Entonces comencé a experimentar lo mismo que tuve cuando la pelea con Brandon un fuerte calor que emanaba de la perla poco a poco me fue recorriendo todo el cuerpo hasta que esta se desintegró totalmente.
Cuando subí al sillín de la bicicleta comprendí que era diferente a las veces anteriores comencé a pedalear con prontitud y el patio se me había quedado pequeño entonces abrí la verja y salí a la calle
estaba experimentando una felicidad insostenible la ciudad dormía pero yo estaba más despierto que nunca, las calles, las plazas, los jardines, todo era para mí diferente montado en mi bicicleta
alcancé a quitar las manos del manillar con seguridad sobre las dos ruedas recordando como Brandon vacilaba delante de Julia sosteniéndose sobre la rueda trasera levantando la bicicleta, y ahí estaba yo haciéndolo incluso sin manos. La brisa de la noche me daba en la cara y por primera vez empecé a pensar que la vida podía ser maravillosa

El ser un virtuoso con la bicicleta no me privaba de sentirme bastante cansado,así que cuando llegué a casa quedé dormido rápidamente eso sí expectante y deseoso de formar parte de la carrera del día siguiente

Por la mañana mi aspecto era dinámico y feliz, les dije a mis padres que había estado ejercitando el día anterior y que ya podría participar en la carrera
Entonces me dispuse a buscar una equipación de ciclista pero me fue un tanto difícil pues no tenía ropa deportiva al final conseguí un conjunto un tanto desfavorecedor y mi padre colaboró el look con una gorra que él solía ponerse a menudo tan dada de sí que me caía casi limitándome la visión
Seguidamente fui a la sede de la organización de la carrera para inscribirme pues estaba abierta el plazo de solicitudes hasta dos horas antes de comenzar.
Luego saqué mi bicicleta a la entrada de mi casa y al verme Julia se acercó y me preguntó
_? Qué bien que vas a participar nunca te había visto montar en bicicleta?

Fue en ese momento en que apareció Brandon que interrumpiendo la conversación añadió:
_no le has visto nunca montar en bicicleta porque no saben montar en bicicleta solo saben montar en un pequeño triciclo  de tres ruedas yo tu le diría a tu mamá que te lo buscara porque creo que no has crecido mucho más de cuando lo usabas con cinco o seis años si no lo recuerdo mal.
_! Basta Brandon! Me parece genial que concurse y participe al igual que nosotros -le contestó Julie un tanto molesta con él

Más yo pasé de ellos y seguí entretenido dándole ilustre a la bicicleta que no era precisamente de carreras pero tras la experiencia del día anterior me daba por muy satisfecho.
todo estaba ya preparado la línea de salida se había dispuesto en la plaza del ayuntamiento y había que hacer un recorrido de unos veinte km bordeando un circuito que alcanzaba dos localidades hasta llegar de nuevo al punto de partida

no todos los que empezaban acababan la carrera pero aquellos que la terminaban recibían un diploma el segundo y el tercero recibían un trofeo y el ganador a más del trofeo recibiría una bicicleta de carrera de último modelo.
el día de la bicicleta como así se llamaba era un bonito día de fiesta en nuestra ciudad se disponían puestos de bebidas y comidas en todas las plazas casi todo el mundo participaba de alguna u otra manera y yo como el corredor número 620

cuando llegó el momento y se dio el pistoletazo de salida aquello era una marea de bicicletas que de forma compacta avanzaba y poco a poco se iba deshilachando me sentía seguro sobre mis dos ruedas era algo que había soñado toda la vida esquivaba con soltura a todos cuanto tenía a mi alrededor sólo tenía ganas de ver a Brandon o mejor que él me viera a mí

ya a lo lejos creo que le reconocí y pude escuchar su voz y la de Julie y cuando en medio de ellos no daban crédito a lo que estaban viendo si yo no sabía montar en bicicleta como es que lo hacían y de hecho tan bién

_ Pietro me alegro de verte venga ánimo tenemos que conseguirlo_me alentó Julie

_espero que me perdonéis pero voy a adelantaros un poco más_le contesté

Como eso de que iba a adelantarnos un poco más quizás se preguntaría Brando, eso era ya demasiado Pietro ni podía ni debía estar delante de él en la carrera
Entonces Brando dejó a Julie y fue tras mi a fin de darme alcance y superarme
Desesperado por el esfuerzo llegó a mi altura, mientras yo presentaba una apariencia descansada y seguía pedaleando a un ritmo frenético
Entonces le dije:
_te veo algo cansadito y no hemos hecho nada más que empezar la carrera -y él me añadió:
_no es el principio lo que importa si no el final
_estoy totalmente de acuerdo le contesté mientras aceleraba aún más mi velocidad

Brandon no quería ser menos y quedarse atrás por lo que seguíajusto a mi lado sofocadísimo y poniendo al límite todas sus fuerzas

Yo iba avanzando con destreza ocupando puestos de cabeza mientras élno le quedó otra que quedarse cada vez un poco más atrás

Era para mí una experiencia indescriptible,por los caminos había grupos de espectadores que entre aplausos nos animaban en la carrera muy especialmente a los que íbamos en zonas destacadas

iría más o menos por la mitad de la carrera pero me sentía en buena forma saboreaba todo cuanto veía a mi alrededor y el hecho de encontrarme entre los primeros era una sensación súper agradable

Con los ciclistas que tenía a mi lado y alrededor, perfectamente equipados con sus bicicletas de carrera me miraban con extrañeza y preguntándose de dónde había salido aquel estraño chico vestido de forma hortera que con una bicicleta de paseo les estaba dando la delantera

El tiempo corría fugazya apurando los últimos kilómetros y la cosa se ponía más dura y difícil más empecé a entrever qué podía tener la oportunidad de ser el primero

De modo que me esforcé aún más a fin de conseguirlo aceleré con todas mis fuerzas dejando atrás medio boquiabiertos a los veteranos ciclistas que querían pisarme los talones

nunca puedo olvidar esa llegada a la meta cuando mi cabeza rompió la cinta gualda como nunca jamás pude olvidar la cara de todos los presentes
me llevé los honores la alegría de mis padres la Copa la bicicleta pero sobre todo la rabia y la envidia de Brandon y sus secuaces
Desde ese día no he dejado de montar con frecuencia en bicicleta y he realizado con soltura toda clase de piruetas que han causado la admiración de todos
fue un recurso que me dio la perla y me vino a dar la tarjeta de aceptación en el instituto me llovieron por todas partes nuevos "amigos" y en algunas ocasiones había salido con ellos por la tarde cosa que a Brandon le molestaba lo más grande