Emperador

Capitulo 13: El Mejor

Humillación Time.

/Konoha/

Un sonriente Naruto era escoltado por sus guardias, había madrugado ya que tenía unas cosas que hacer así que no tuvo otra opción que dejar a sus prometidas en cama para que durmieran más y recuperaran fuerzas, se sentía bien después de una noche de descanso con sus chicas.

Mantuvo su paso alegre volteando a los lados con interés, los niños lo veían con asombro y curiosidad ya que después de todo era un extranjero pero los padres no veían lo mismo, no habían cambiado las cosas en todo esté tiempo pero no tenían la culpa, nunca la tuvieron de hecho.

Habían convocado un tour por la aldea, deseaba más que le enseñaran la aldea y los cambios que hicieron en los últimos años, por lo que tenía que verse con el Hokage en las puertas de la torre para empezar su recorrido, era algo ilógico ya que el vivía aquí pero deseaba ver si cambiaron un poco y hacer una pequeña aportación a los desafortunados (en otras palabras humillarlos).

Aunque era más dar oportunidad de una mejor calidad de vida a las personas, sería un recorrido sencillo por partes importantes de la aldea como la Academia, Hospital, Campos de Entrenamiento, Zona Comercial y Seguridad. Era algo temprano pero aprovecho para comer algo en un lugar que siempre los Namikaze iban, fue divertido ver como el dueño del local, Teuchi, sostuvo su pecho alterado y casi teniendo un infarto al ver al Emperador en su humilde morada y también su hija que se sonrojó al ver al Rey de Occidente. Tuvo un almuerzo tranquilo ya que sus guardias no permitieron que nadie entrará al lugar e interrumpiera el almuerzo de su rey, ambos cocineros sudaron a mares por la visita del hombre más poderoso fuera de las naciones elementales pero cuando el Emperador devoró cuarenta tazones de ramen se sintieron mejor al saber que el hombre disfrutó la comida e incluso el Emperador les ofreció ir a Occidente donde serían bien recibidos pero Teuchi quería permanecer en su hogar con sus fieles clientes pero Naruto mantuvo su oferta para un futuro y les dió una generosa cantidad de dinero para poder mejorar sus instalaciones, cabe decir que Teuchi no pudo más y se desmayó al ver la cantidad de dinero, nunca había visto tantos ceros.

Salió satisfecho tanto por la comida como por haber superado el record que hicieron los Namikaze.

Decidió quemar las calorías con un poco de entrenamiento en la mañana y ayudo bastante a bajar la deliciosa comida. Pero toda esa comodidad solo fue momentánea, era observado, no sabían que tan estúpidos eran pero no estaba ciego. Luego entenderían. Invadían su privacidad algo que lo molestó y lo mostraría luego, no se dió cuenta que terminó en un parque.

Estaba lleno de vida con niños jugando y sus padres cerca, aunque algunos no pudieron evitar sentirse incómodos al ver al Emperador ahí con esa sonrisa que tanto odiaban. Pero su vista se enfocó en alguien en especial, tuvo un golpe de nostalgia al ver a ese niño, se parecía demasiado a él pero sus ojos eran púrpura. Leía un libro de medicina, eso lo hizo sonreír, los niños deseaban convertirse en shinobis para estar en misiones "increíbles", rescatar princesas y aprender jutsus poderosos. Todo eso lejos de la realidad pero ver a ese niño querer ser un médico lo llenó de tranquilidad.

Naruto se acercó al niño que tenía su lengua afuera y su rostro lleno de concentración, se rió entre dientes, era una cabeza dura como Kushina.

- Si sigues esforzándote así te saldrán canas.

Ren Namikaze levantó su cabeza con sorpresa al ver al hombre cerca de él, era el hombre que vió antes en las calles y que había hablado con sus padres.

- Hola.

Ren saludó con una sonrisa.

- Veo que te interesa la medicina.