He sido mejor amigo de Bianca por casi diez años. Nos conocimos de niños jugando en un parque, un niño la había empujado y la defendí, desde ese momento nos volvimos inseparables.
Mi enamoramiento fue creciendo cada día, es la persona más dulce y amable que conocí, una verdadera compañera de vida que ha estado en las buenas y en las malas a mi lado. Hemos pasado cumpleaños y vacaciones juntos, Navidades y Año Nuevo, incluso fue la que más feliz se puso cuando cumplí mi sueño de entrar a la Fórmula 1.
Este fin de semana la carrera tocaba en Mónaco, por lo que mi familia incluida Bianca asistirán. Ahora estaba ayudándome a preparar la valija.
-Estoy emocionada por ir a ver la carrera y también a Carlos.-dice riendo tirada en mi cama. Ruedo los ojos un tanto celoso. Hace algunos meses me confesó su obsesión por mi teammate, él lo sabe y aprovechan para molestarme.
-Se supone que deberías estar emocionada por verme a mí, no a mi competencia.-digo haciéndole cosquillas, ella se retuerce riendo y en un momento, quedamos cerca. Llevo mi mirada desde sus ojos a sus labios sonrientes. Es preciosa. Ella levanta su cabeza para dejar un beso suave en mi mejilla haciéndome cerrar los ojos ante el contacto cálido.
Mi corazón late como si en cualquier momento pudiera salir corriendo de mi pecho.
Nos alejamos y terminamos por armar la valija, para luego encaminarnos hacia el paddock.
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Bianca
El momento que tuve recien con Charles sigue vivo en mi mente. Es difícil lograr que mi corazón no reaccione a estas acciones, él siempre está ahí comportándose todo amable y dulce cuando se trata de mí. Es una tortura.
Hoy iríamos a verlo correr al circuito. Llegamos alrededor de media mañana, nos llevó hacia el garage para enseñarnos el auto y luego su habitación de descanso. Entre todos decidimos tomarnos un café antes de que él se vaya a preparar. En el camino, nos encontramos al español Carlos Sainz.
-Pero si es la familia Leclerc y la hermosa Bianca.-saluda a todos y me abraza a lo último. Había confesado a mi mejor amigo que tenía un pequeño crush con su teammate para ponerlo celoso, aunque no creo que haya funcionado mucho. En una de las tantas carreras que fuimos, Carlos y yo nos hicimos amigos y le he comentado sobre mi enamoramiento con Charles, se le ocurrió la idea de coquetear conmigo cada vez que me veía para enojarlo.
Ahora solo tenía su vista lejos de nosotros dos abrazados, siento a Carlos reír y deja un beso en mi cabeza
-Si hoy llego a la pole, va dedicado a ti Bian.-dice el español mirando de reojo a mi amigo, Pascale ríe con nosotros
-Mas te vale o no vendré mas a verte.-contesto haciéndome la enojada
-Se verían bonitos juntos ustedes. Carlos estás soltero?-interviene la mamá de Charles
-Si, desde ya algunos meses que estoy en busca de mi media naranja-bromea- Aunque parece que ya la encontré, que dices Bian?-pregunta dándome una mirada coqueta, golpeo su costado y niego con la cabeza
-Llévame a una cita primero y luego te digo.-le sigo la broma. Todos reímos menos mi mejor amigo, Carlos se acerca a mi oído
-Ves que está celoso? No puede ni siquiera fingirlo.-susurra
-Deja de decir idioteces y ve a prepararte. Mucha suerte para hoy Carlitos.-digo dejando un beso en u mejilla y separándome de su lado. Me acerco a Charles para darle un abrazo de buena suerte. El monagesco me apierta hacia él, veo su cara y está mirando al español con altanería
-Ella vino a alentarme a mí, lo siento mate.-habla Charles. Escucho como Carlos suelta una carcajada y se va. Mi mejor amigo baja su vista a mí y nos veíamos con nuestras caras de cerca
-Buona fortuna Charlie.-digo sin necesidad de hablar fuerte.
-Grazie dulzura. Nos vemos a la vuelta.-agacha su cabeza y deposita un beso en mi nariz. Ambos suspiramos y me suelta para irse hacia el garage.
