W - larry (traducción)

Capítulo 27

Mi cabeza estaba pesada y mis párpados aún más pesados.

No sé cuánto tiempo dormí, pero despertar fue un proceso mucho más difícil de lo que debería haber sido.

Incluso antes de que mis párpados se abrieran y mis ojos se enfocaran en el techo blanco, sonaba un silbido insistente cerca de mi oído izquierdo. Me moví con dificultad, y sentí dolor en todo mi vientre, pecho y espalda.

Vi que el silbido provenía de uno de esos aparatos de hospital.

Del esfuerzo por moverme y tratar de situarme, un gemido comprimido salió de mis labios, y en poco tiempo un rostro se acercó a mi campo de visión.

- ¡Hijo mío! ¡Estás despierto! - El rostro de Anne, mi madre, me miraba con los ojos llorosos y una expresión de emoción. Ella sostuvo mi cara entre sus manos y dejó un suave beso en mi frente - ¡Voy a llamar a una enfermera! ¡Te despertaste, mi amor! - Una lágrima escapó de sus hermosos ojos y resbaló por su mejilla - ¿Cómo estás?

Eran muchas preguntas y frases que asimilar.

Realmente no entendía lo que estaba pasando. Lo último que recuerdo es cuando estaba tirado en el suelo de la estructura del invernadero y Louis estaba a mi lado.

¡Y entonces, recordé! El ruido de un disparo y luego otro en la secuencia. Louis había sido impactado y terminó cayendo a mi lado.

Eso hace que un mal escalofrío recorra mi cuerpo apoderándose de todo.

- Lou... - Intento hablar y mi voz sale ahogada por el tiempo sin uso - Lou... - Repito

Veo la expresión de mi madre volviéndose un poco confusa. Pero me duele el pecho de adentro hacia afuera, pensando en lo que pudo haberle pasado.

Necesito saber cómo está, dónde está, qué le han hecho.

Todavía sé todo lo que hizo, pero él sigue siendo el hombre que he amado toda mi vida y al pensar que algo malo le sucedió, siento la desesperación que se apodera de mí. Necesito saber de él, necesito verlo, necesito tocarlo, y aunque esté pagando por sus crímenes, todavía tengo que asegurarme de que está bien.

Trato de levantarme, quitándo la sábana que cubre mi cuerpo desde arriba, y las máquinas a las que estoy conectado empiezan a aumentar los silbidos casi a una velocidad aterradora.

- ¡Lou! - trato de gritar, aunque mi voz sale baja para un grito

- ¡Calma, amor! - mi madre me pide, tratando de agarrarme para que no me levante

- ¡Lou! - Repito, y mis ojos se llenan de agua mientras intento ignorar un dolor agudo en mi abdomen.

- ¡Rápido! ¡Enfermera! - Mi madre grita mientras intenta agarrarme por los hombros para evitar que me siga levantando. Mi vientre duele mucho. Siento un fuerte pinchazo justo debajo de mi estómago y por eso doy un grito ahogado de dolor. Pero ni esto me impide intentar levantarme, pues necesito saber cómo está mi esposo.

- ¡Amor, no puedes levantarte! ¡Por favor, quédate quieto! ¡Acuéstate, mi amor! ¡Por favor! El doctor ya viene...

- ¡LOU! - grito más fuerte, ahora que mis cuerdas vocales parecen estar más despiertas - Mamá... ¡¡¡Lou!!! ¿Dónde está Louis? - Lágrimas gruesas toman mis ojos y los de mi madre también, que parece desesperada, pero yo estoy mucho más desesperado que ella.

- Él está bien, mi querido. Por favor, cálmate - Ella llora - Te juro que está bien y tendrás noticias de él. Pero no intentes levantarte, no puedes. ¡Acuéstate, amor!

- ¡No! - grito desesperado - ¡Necesito ver a Louis, mamá! ¡LOOOU! - Grito su nombre como si pudiera oírme y venir a decirme que todo lo que pasó fue una pesadilla.