CAPÍTULO 82 SECUESTRO?

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En la estación de policía, la mujer de cabello largo y azulado, había terminado de escribir la nota.

-Podría entregársela a Krilin, por favor? Junto con este celular.  y le entregó la nota y el celular, al atontado policía.

-Claro, hermosa! - respondió y recibió los dos artículos, en su mano, sin dejar de mirar a la chica, sonrojado.

-Gracias, guapo... Yo me retiro... - sonrió la chica y se incorporó de la silla.

-Espere por favor... Estaba por salir a comer y me preguntaba si podría honrarme, con su grata compañía... La verdad no es agradable comer solo...

-Me está invitando a una cita? - preguntó la mujer.

-Si está, de acuerdo...

-Claro! Siempre quize salir con un policía! Y mi exnovio Krilin es casado... - respondió la mujer con una sonrisa.

-Permitame un momento... Voy a checar mi tarjeta! Y regreso! - respondió el policía emocionado y se fue por uno de los pasillos.

Mientras esperaba, la mujer tomó el teléfono y lo encendió.

Miró el protector de pantalla y observó la foto familiar.

-Asi que está es su familia...

De repente el teléfono comenzó a sonar.

La mujer dudó en responder, pero miró el nombre y presionó el botón.

-Hola!

-Marron! Linda, que bueno que contestas! - se escuchó la voz del beisbolista, agitado.

-Qué ocurre, Yamcha?

-Donde estás? - preguntó el beisbolista.

-Vine al trabajo de Krilin, a entregarle su celular...

-Dejalo y sal de ahí! Es un sitio peligroso, para las chicas lindas como tú, linda Marron! - respondió el beisbolista.

-Gracias por preocuparte, Yamcha... Pero me siento muy protegida y segura... - dijo la mujer con ilusión.

-Por qué dices eso, Marrón? - preguntó el beisbolista, nervioso.

El policía salió y se dirigió a la chica.

-Ya estoy listo! Vamos preciosa!

-Te dejó Yamcha! Iré a comer con un apuesto policía... - sonrió la mujer y colgó el teléfono.

-NO, MARRON, ESPERA! - gritó el beisbolista, frustrado y dió un fuerte golpe, al volante.

-Maldición! Si ese policía era Krilin... Estaré en serios problemas... Dónde te metiste Puar? - pensó el beisbolista, con preocupación.

Mientras tanto, el pájaro azul, iba volando con dificultad, resistiendo las altas temperaturas del sol.

Descendió con dificultad a una cuadra de la comisaría y abandonó la transformación.

-Llegué! - jadeó y comenzó a caminar con lentitud.

Iba a entrar a la comisaría, pero miró un maniquí, a través de un escaparate y se le ocurrió una idea.

El policía en turno, se había sentado sobre el escritorio. Era un poco distraído y no traía sus lentes.

-Hola! - saludó una chica peliroja, de ojos verdes, con unos ojos, algo extraños.

-Disculpe señorita, puedo ayudarla en algo?
-preguntó el oficial, mayor.

-Estaba buscando a mi amiga... Quedamos de vernos aquí... Tiene cabello azul y muy largo...

Un Nuevo Miembro de la Familia DBSUPER Opowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz