Capítulo 34

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Se sientan en sillas de plástico fuera de la habitación del hotel, Wooyoung alimentando a Chayanne con la costosa comida de gatos que le pidió a San. San está medio dormido en el hombro de Yeosang, y Yeosang simplemente disfruta de la lenta brisa de la tarde.

Un auto entra al estacionamiento y para en un lugar vacío, una mujer y un hombre bajan
y luego la mujer abre la puerta trasera. Una pequeña niña sale, tiene colas y un auto de
juguete en su mano. Sólo así, Yeosang piensa en Lia. Ella está bien. Seguramente lo está.
Se pregunta si alguien le compra paletas, si ha estado haciendo su tarea, si su madre le da
tres comidas al día. Lia probablemente también lo extraña bastante. Demonios, tal vez incluso esté molesta con él por haber desaparecido así.

Si tan sólo estuviera muerto no me preocuparía que ella estuviese molesta conmigo.

“Yeosang.” Yeosang mira a San, que lo observa con una expresión extraña.

“¿Sí?”

“Llamé tu nombre varias veces.”

“Oh.” Yeosang fuerza una sonrisa. “Lo siento, sólo me distraje.”

San asiente, absolutamente poco convencido. “¿Estás bien, cierto?”

“Si.”

“Ok.” San pone su cabeza de nuevo en su hombro, sus cabellos rojizos cosquilleándole el cuello. “Bien.”

No está bien. No todo el tiempo, al menos. La mayor parte del tiempo sí, se divierte, es
feliz con ellos. Pero hay otras veces. Hay momentos en los que Yeosang desea poder recordar sus pesadillas. Tal vez si lo
hiciera todo el desastre en su cabeza tendría sentido.

Tal vez.

Así que hay veces en las que no está bien y se encuentra mirando a la nada hasta que
Wooyoung le toca la mejilla y lo observa, besándolo en la comisura de sus labios.
Luego hay veces en las que lo único en lo que se puede concentrar es en la forma en la
que San arquea su espalda cuando toca ciertos lugares, o como Wooyoung dice su nombre
en suspiros con sus manos tomando las sábanas. En esos momentos, el calor de sus cuerpos y la forma en la que ambos se sienten bajo sus manos son suficientes como para
mantenerlo con los pies en la tierra.

Y Dios, los ama demasiado por eso.

EPOCH | WooSanSangWhere stories live. Discover now