Capítulo 38

556 83 0
                                    

Entonces la puerta se abre y Yeosang prácticamente corre.

“¡Esta casa es jodidamente asombrosa!” Dice. “Tiene cuatro baños, cuatro. Uno de ellos
tiene un maldito jacuzzi.”

“Lo sé.” Dice San.

“¿¡Has visto la cocina!?” Wooyoung sisea mientras cierra la puerta. “Esa cocina es más
grande que mi apartamento en Daegu y… mierda, ¿Esas son sábanas de satín?”

San sonríe. “Sí.”

Wooyoung básicamente salta en el colchón, riendo felizmente, rodando por la cama.
Acaricia las sábanas eufóricamente. “Adoro este lugar. ¿Podemos mudarnos acá?”

“Estoy de acuerdo.” Dice Yeosang. “Mierda, hay un baño privado aquí también.”

San mira a Yeosang mientras abre la puerta del baño y entra. “Wooyoung, mierda, este baño tiene la ducha más grande que he visto en mi vida.”

“Adoro este lugar.” Repite Wooyoung, rodando en la cama emocionado. “Excepto por esas alfombras, tenemos que quemarlas.”
Yeosang vuelve del baño y también se acuesta entre ellos.

“¿Hongjoong es modelo?”

“Es jodidamente hermoso.” Añade Wooyoung. “Mi orgullo duele.”

“Eres más hermoso.” Dice San, Wooyoung le pega en el hombro. “Ouch, ¿Qué mierda?”

“No digas esas mentiras. Él luce como si pudiera estar en las páginas de Vogue, por
favor.”

“Tú también, de qué habl… vuelves a golpearme y te azoto.”

Wooyoung sonríe. “Tal vez quiera eso.” Se recuesta en la cama. “Pero no aquí. Estas sábanas no pueden ser manchadas. Nunca.”

Yeosang carcajea un poco, y San le ve pasando sus dedos por el cabello de Wooyoung.

“Así que, ¿Qué hacemos aquí?” Pregunta.

“Supongo que no es por las sábanas de satín.”

“Seongwha puede ayudarnos.” Dice San. “Nos dará sus servicios.”

“¿Qué son…”

“Muertes virtuales.”

Yeosang se sienta inmediatamente, mirando a San con los ojos muy abiertos. “¿Me estás jodiendo?”

San niega con la cabeza. “Nos hará desaparecer del mapa y nos dará nuevas identidades. Será como si nunca hubiéramos existido.”

Wooyoung parpadea. “Espera, ¿En serio?”

“Sí.”

“Mierda.” Yeosang se recuesta de nuevo. “La casa se explica ahora. ¿Cuánto dinero se
necesita para hacer eso?”

“Mucho.” San se encoge de hombros. “Pero me debe un gran favor.”

“¿Qué favor?”

Antes de que San pueda responder hay golpecitos en la puerta, los tres se sientan y la
misma se abre, la cara de Hongjoong se asoma.

“Deben de estar hambrientos.” Dice. “Estoy haciendo la cena, ¿Quieren venir?”

Wooyoung asiente, sonriendo felizmente. “Te ayudaré.”

EPOCH | WooSanSangWhere stories live. Discover now