𝙈𝙉𝘾𝙃𝙇𝘿 | Naju está rodeada de un espeso y húmedo bosque, dónde animales y otros seres corren a la velocidad de la luz. La presencia de los hermanos Park ha comenzado a agitar todo lo sobrenatural del lugar, así como uno de ellos descubre poco...
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Los siguientes días fueron silenciosos. No podía describirlos de otra forma.
En ese tiempo Jongho había dormido con él en la misma cama, aunque tampoco estaba seguro si realmente lo hacía, pues le escuchó varias veces levantarse y caminar alrededor del cuarto en medio de la noche. Lo veía --con ojos entrecerrados-- frotarse los brazos con fuerza, quizás demasiada, antes de volver a acostarse a su lado y fingir que había recuperado el sueño. Todo para minutos después volver con su silenciosa ronda. Era como si su estado de alerta le obligase a revisar los alrededores cada tanto. Como si tratara de prevenir que aquello que vio en el bosque días atrás los atacara mientras dormían.
Referente a los Kang; sostuvo conversaciones solo con Yizhuo una vez la mañana llegaba y la chica le llamaba desde algún lugar de la propiedad para que saliera a desayunar. Con Taeyong solo intercambió saludos formales, pues ya había entendido que él no era mucho de hablar. Gracias a la muchacha se había enterado de que el doctor Junmyeon había tenido que partir a un pueblito más cercano de Gwanju, para atender un caso en el que le necesitaban, pero que no demoraría mucho en volver. Y sobre Yeosang, parecía un fantasma. Había dejado de hablar tan seguido y se limitaba a responder con monosílabos.
Esos amaneceres se centraron en escuchar a los hermanos hablar sobre lo nuevo que había ocurrido en su instituto o en el pueblo. Al mismo tiempo, él desayunaba el montón de comida que le preparaban, solo, pues ellos aseguraban que ya habían comido mucho antes, y Jongho solo se excusaba diciendo que no tenía apetito. Seonghwa agradecía que al menos Yizhuo no tuviera la misma actitud que el otro par, pero se preguntaba si ella y Taeyong tenían conocimiento de lo que había sucedido aquella noche, y si era así, ¿estaban actuando como si nada hubiera sucedido? Y si no, ¿eso había quedado solo entre el rubio, su hermano y él?
Junto al desayuno comenzó a tomar las medicinas diarias que el doctor Kang le había recetado, pues los dos estudiantes le habían hecho el favor de reclamarlas en uno de sus regresos de la escuela. Gracias a eso el dolor que aun residía en sus músculos comenzó a desaparecer, dejándole dormir y moverse con más comodidad. Ya no le avergonzaba tanto el desplazarse por la casa, pero seguía manteniéndose respetuoso y pidiendo permiso para algunas cosas. Aunque una vez Yizhuo y Taeyong abandonaban la propiedad para volver a su rutina en Naju, el silencio e incomodidad volvía a reinar entre todas las paredes.
Ahora mismo se encontraba solo en los sillones de la sala, admirando de nuevo el paisaje que los ventanales le dejaban ver. Jongho había decidido quedarse dentro de la habitación, y no tenía muy claro dónde estaba Yeosang, suponía que en el segundo piso. Quedaban un par de horas para que los otros dos volvieran del instituto, lo que significaba la ausencia total de voces que le distrajeran un poco de todo lo que le atormentaba en la cabeza.
