Episodio 7

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"¡Jesús, ustedes lo estaban haciendo tan bien estos últimos meses, y de repente deciden pelear con el hijo del jefe!" Su padre lo regañó.

"Padre, estaban intimidando a Kiri. Tuve que defenderla". Lo'ak dijo.

"Padre, intervine para proteger a mis hermanos. ¡Tal como tú y mamá siempre me decís!" Neteyam dijo.

"Entiendo que ustedes dos hicieron lo que se supone que deben hacer. Pero eso no significa darle al hijo del jefe una cara magullada y ensangrentada. Mira, ve a disculparte. No me importa cómo lo hagas. Ve."

Lo'ak gimió molesto. Salió de la tienda a toda prisa. Neteyam suspiró abatido. Se dio la vuelta pero su padre lo detuvo.

"Neteyam".

"¿Sí, señor?"

"¿Cómo estaban los otros chicos?"

Los oídos de Neteyam se animaron, "Peor... mucho peor".

"Bueno. Sal de aquí." Su padre se volvió.

Neteyam sonrió un poco ante eso, saliendo de la tienda. Vio a Lo'ak justo adelante. Neteyam corrió tras él. Neteyam golpeó la cabeza de Lo'ak con dureza. Lo'ak apartó la mano.

"¿Siempre tienes que tocarme?" Lo'ak siseó.

"Te mereces ese empujón. Será mejor que vayas a disculparte.

"Ja, ¿de verdad crees que me voy a disculpar? No podría importarme menos que sea el hijo del jefe. Sucker ni siquiera puede pelear–"

"Tranquilo. Los aldeanos podrían oírte.

"No me voy a disculpar. Se puede ir."

Neteyam se burló: "¿Te escuchas ahora mismo? Eres el que empezó la pelea, ¿pero me estás diciendo que vaya a disculparme? Realmente eres un alborotador.

"Sí, sí, soy alborotador esto, alborotador aquello. Escucho esa mierda lo suficiente.

La actitud despreocupada de Neteyam desapareció: "No estarías escuchando toda esa mierda si no empezaras algo".

"Cállate, voy a ir a nadar. Ni siquiera pienses en seguirme.

Lo'ak empujó a Neteyam a un lado, caminando hacia el agua para zambullirse. Neteyam quería gritar de frustración hacia su hermano. Pero no pudo. Él nunca podría de todos modos. Parece que va a tener que disculparse después de todo. Neteyam también fue al agua, en dirección opuesta a Lo'ak.

Neteyam se subió a su criatura marina, nadando alrededor de las aguas para encontrar a Aonung. Eventualmente lo hizo y... oh genial. Aonung estaba con Rotxo y los mismos otros dos chicos de Metkayina con los que peleó. Neteyam nadó hacia ellos.

Si no es el chico del bosque. Aonung frunció el ceño.

Neteyam observó los moretones en el rostro de Aonung. Realmente se sintió mal al ver los moretones en el chico.

"Vine aquí a disculparme. Mi hermano y yo no deberíamos haber actuado así".

"Esta bien. Te perdono a ti y a tu hermano", sonrió Aonung, "Deberíamos ser amigos. Tu y tu hermano."

Neteyam levantó una ceja ante eso, "¿Sí? Entonces comencemos de nuevo desde esa pelea".

"¿Quieres venir a cazar con nosotros? ¿Fuera del arrecife?

"No creo que se nos permita ir tan lejos".

"Tu elección. Sé un buen chico entonces. Aonung movió a su criatura para alejarse nadando.

Los chicos Metkayina se rieron mientras se alejaban nadando con sus criaturas. Neteyam se quedó en el lugar exacto observándolos irse. Él no se va a ir. Él sabe mejor que salir del arrecife. Tonowari, el jefe de Metkayina, se lo dijo él mismo a su familia. Neteyam giró hacia el otro lado, regresando al pueblo.

~~

Neteyam estaba ayudando a una mujer metkayina adulta a recolectar bayas para su familia. No tenía nada más que hacer ya que no podía encontrar a Lo'ak por ninguna parte y sus hermanas estaban ocupadas haciendo sus propias cosas. Tenía que matar el tiempo y quizás la mejor manera de hacerlo era ayudar a sus compañeros Metkayinas.

Neteyam también estaba pensando en Aonung y sus amigos. Bueno, más de Aonung. Se han ido por bastante tiempo. Por lo general, escucharía metkayinas adultos, adolescentes y niños saludando al joven heredero cada minuto. Pero nada. Neteyam estaba empezando a preocuparse de que algo le hubiera pasado al grupo. Y probablemente sea el único que sabe adónde fueron. Pero Neteyam esperaba que probablemente estuvieran al otro lado de la aldea, haciendo sus deberes y tareas habituales.

"¿Todo bien, joven?" Preguntó la mujer Metkayina.

"Sí señora, todo está bien." Neteyam respondió.

En ese momento, Neteyam vio a Tsireya caminando hacia él. Neteyam dejó la canasta cuando la niña más joven se acercó. Pero Neteyam vio que tenía una mirada extremadamente preocupada en su rostro.

"¡Neteyam! ¡Aonung no está!" Ella exclamo.

Los aldeanos alrededor escucharon esto. Neteyam sintió que se le revolvía el estómago al escuchar eso.

"¿Qué?" Neteyam estaba estupefacto.

"¡Rotxo y los demás regresaron de cazar pero sin Aonung! Dijeron que fueron atacados y Aonung distrajo al monstruo lejos de ellos. Y no pudieron encontrarlo. ¡Tenemos que encontrar a mi hermano!"

"¡Bueno, vamos entonces!" Neteyam exclamó.

Tanto Tsireya como Neteyam corrieron hacia las aguas para subirse a sus criaturas marinas. Tsireya estaba anunciando a los aldeanos cercanos que su hermano había desaparecido. Todos los guerreros Metkayinas reunieron sus armas y equipos para prepararse para buscar al heredero. Cuando Neteyam y Tsireya se acercaron a las aguas, Lo'ak los alcanzó.

"¡Tsireya, les conté a los otros aldeanos del otro lado sobre Aonung!"

"Gracias, Lo'ak". Sonaba como si fuera a llorar.

Los tres adolescentes se subieron a sus criaturas marinas. Neteyam iba a ponerse en marcha, pero Tsireya lo detuvo con la mano en su hombro. Neteyam la miró.

"Neteyam, por favor encuentra a mi hermano".

Neteyam colocó su mano sobre la de ella, "Lo haré. Lo haré lo mejor que pueda."

Ella asintió. Y tanto ella como Lo'ak partieron en la otra dirección. Neteyam zarpó él mismo. Maldita sea, Neteyam iba a tener que nadar más allá del arrecife.

Notas:

¡Neteyam, será mejor que encuentres a Aonung! ¡Él te necesita!

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