Enzo lo odiaba, odiaba esos labios tersos, su cabello siempre bien arreglado, su piel sin un solo poro, sus ojos de cachorro muerto de hambre, odiaba sus buenas calificaciones y le parecía sumamente pretencioso como al entrar en cualquier espacio to...
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Entré al baño limpiandome la baba de la barbilla, puse a calentar el agua en el tanque ya que hacía un frío a la noche, mientras esperaba sentado en la tapa del hinodoro.
¿Qué acababa de pasar? Obviamente sabía lo que soñé, no soy un nene inocente, pero nunca había soñado así con un hombre, eso me tomó por sorpresa, no niego que fué bastante bueno y tampoco voy a ocultar que me quedé con un poco de ganas...
Estaba frustrado, ÉL me parecía familiar, seguro lo conocía, lo tuve en la punta de la lengua y podría decirse que literalmente.
Me río por mis pensamientos pelotudos pero ¿Y si realmente lo conocí? Podría ser cualquiera igual, o tal vez mi destino era conocerlo en un futuro, capaz si lo hice en mi vida pasada.
El ruido del agua caliente me sacó de mis pensamientos místicos, desgraciadamente me tenía que bañar.
Me desvestí y me metí a la ducha pero cada vez que cerraba los ojos lo veía otra vez, dios, pensé que lo pajero se me había ido pero supongo que no.
Sinceramente nunca me había gustado nadie más que Valentina y creo que por eso me fué tan difícil dejar ir el concepto equivocado que tenía de ella, al fin y al cabo solo la tenía idealizada, al pedo, no existen las personas perfectas solo depende de quien lo véa, ni siquiera el gil de Álvarez que hasta sus granos le quedaban bien.
Para un toque, hora que lo pienso, el chabón de mis sueños se parecía a...
No podía ser, yo nunca besaría a ese gil y seguro ni se sentiría tan...suave ni apretujable...
"¡Enzo!..."
Dios, tengo un problema.
—QUÉ MIERDA—
—¿¡Que paso?! —
—¡Nada ma! —Le respondí a quien preguntaba desde afuera —Solo...¡Un sapo! —Traté de excusarme.
—A bueno, ahora el baño es de él, yo no lo pienso sacar —Contesta y no escucho nada más después.
Mientras tanto veía esa interesante reacción que me había causado mi imaginación, estaba confundio, me había exitado...¿¿Por Álvarez??
No, seguramente eran mis hormonas, seguro es por eso y que no me he masturbado en mucho tiempo.
Salí de la ducha y traté de vestirme lo más rápido que pude, entré a mi pieza y cerré la puerta con la tranca, mi miembro dolía y esa molestia no desaparecería así como así. Me tiré en la cama, bajé mi boxer e intenté "arreglar este problema" intentando mantener los ojos abiertos ya que cada vez que los cerraba volvía a aparecer él, quien plagaba mis oídos de su voz diciendo mi nombre y mi vista de esos pequeños detalles..
Ese lunar en el muslo aquel que apenas se dejaba ver un poco más arriba del borde del short, esos pequeños granitos en sus mejillas sonrojadas.
Más, quería ver más, no me bastaba con recordar su blanda piel, su adorable mirada triste, no me bastaba imaginar cómo sería su expresión de éxtasis, quería más, quería verlo pero ¿Cómo sería?
