¡No estás solo!.

03

- ¿Por qué Makino? - Luffy miraba como Ben dejaba al rubio en el futón, el mayor salió de la habitación.

- Luffy aún que no me gusta esto debemos hacerlo. Causaremos problemas y no sabemos si el espejo puede hacer algo más. No sabemos si nos dejara otra vez pasar - Makino miro con cariño al rubio que dormía, tanto Ben y ella vieron como las heridas del menor se curaban solo.

- No quiero, no me gusta que esté ahí. Le hacen mucho daño - Luffy tenía sus ojos rojo de tanto llorar.

- Hay muchas cosas que no sabemos luffy - Makino suspiro, cargo al menor.

Ben salió del espejo aún estaba confundido y sorprendido por esto, pero no quería cuestionar nada ahora por la situación que habían presenciado. Había ido a verificar toda la casa, había trabado la puerta y las ventanas las había cerrado por completo. Por ahora estaba tranquilo con eso pero aún así no quería dejar al niño en ese lugar.

- Cheque que todo esté cerrado - Ben miro a luffy que abrazaba del cuello a la chica.

- Gracias - Makino sonrió.

Ben se retiró despidiéndose de los dos, fue hacía al barco donde el silencio había gobernado. Subió al barco y vio a todos sentados, Shanks estaba con la cabeza baja.

- Descubriste algo - Ben se sentó enfrente del peli rojo, todos habían visto a su capitán todo manchado. Cómo normalmente ellos estaban acostumbrados ese tipo de cosas, después de todos son piratas. Pero saber la situación que les habían contado era algo que no se lo podían imaginar.

- Fue poca, tal parece que todos de esa aldea odian al pequeño. Dicen que es un demonio que destruyó su aldea y que mato muchas personas - Shanks levantó la cabeza, todos vieron que estaba hablando enserio.

- Solo es un niño - Yasopp apretó sus puños, pensado en su hijo. Su hijo y su esposa eran lo más valioso para él y poner a su hijo en lugar del menor le hacía arder de la furia.

- Sus heridas se curaron solas, pero aún así dejara moretones y cicatrices. De todas manera el cuerpo del niño está lleno de cicatrices - Ben tomo su pistola, su mano le hormigueaba.

- ¿Será una Akuma no mi del niño? - uno de la tripulación hablo.

- No sabemos, el lugar donde vive es raro pero aún así puede ser una isla qué no conozcamos - Shanks suspiro.

Pensar en todo eso le hacía doler la cabeza, ¿demonio? ¿Un niño? Por dios, hasta el sabe que un niño no puede hacer nada de eso. A menos que le metas ideas estúpidas, pero por dios, ¿cómo un niño puede hacer eso? Solo son idiotas que buscan culpar a alguien y ese niño lo esta pagando.