Una Historia Diferente

III.- Conociendo al Alfa

Stiles alzó una ceja la ver como los menores de su manada caían del techo de la mansión, Mason siendo cubierto por Liam y Corey.

— ¿Quiero saber? — pregunto el alfa cruzando sus brazos sobre su pecho.

— No creo. — dijo Liam con una sonrisa traviesa.

Uno de los paneles solares cayó justo al lado de los menores haciendo suspirar al alfa y que los demás salieran de la mansión sin poder evitar reír al ver la escena frente a ellos.

— ¿Por qué siempre que hay problemas están ustedes tres involucrados?

Los otros rieron más fuerte, amaban ver como esos tres chiquillos le daban un poco del vida a su alfa.

— No lo sé, alfa. Créeme me lo he preguntado desde que llegué a la manada. — le dijo Corey con un suspiro.

— ¡Oye! Nos haces ver mal. — se quejó Liam con un puchero mientras que Mason solo sonrió, su novio tenía sus ocurrencias.

— Arreglen el panel y después vayan al bosque, les toca vigilar esta tarde.

— Por cierto, Sti. — el alfa lo miró — Deberías de darles una oportunidad a los Hale, son bastante agradables.

Todos se quedaron quitos al escuchar eso, sabían que el tema de los Hale era muy delicado y temían que fuera a explotar con cualquiera que lo mencionara.

— ¿Por qué lo dices? ¿Ya son amigos de ellos?

— Algo así, solo que no son como Gerard ni Kate. — miró al suelo — La verdad yo también los odiaba y me daba un poco de miedo acercarme a ellos, pero son diferentes. Cora es un poco agresiva pero es divertida y amable, Derek parece tímido pero es bastante simpático al igual que Isaac, Malia y los demás. Creo que ellos también odian a Gerard y Kate. — dijo en un susurro Liam.

— Eres un buen cachorro. — le dijo Stiles al menor mientras revolvía su cabello.

— Debo admitir que esa chica Malia es bastante atractiva, su lado salvaje pero tímido me llama la atención. — comentó Kira con un a ligera sonrisa.

— ¿En serio? Nunca te había interesado nadie y ahora tienes tus ojos puestos en la chica Hale. — le dijo Scott mientas negaba con la cabeza.

— No todos son como Malia Hale, esa chica tiene algo que hace que mi zorro se emocione. — le dijo Kira mientras movía sus cejas y los demás solo ponían cara de asco.

— Si alguna vez llegas a salir con ella no quiero saber nada de nada. — dijo Jackson con un deje de diversión.

— Me voy. — dijo Stiles sin mirar atrás, su familia estaba realmente loca.

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Derek se encontraba paseando por el pueblo, habían pasado ya algunos meses desde que habían llegado a este lugar y ya lo sentía como su hogar. Lo único malo es que había escuchado a sus padres que Gerard y Kate planeaban regresar al pueblo, eso no era bueno, además de que la manada Stilinski, el alfa, los asesinaría en cuanto tuviera la oportunidad; él no se quedaba atrás, no quería a Gerard ni a Kate, ellos solo habían hecho su vida imposible de niño al buscar que se convirtiera en el mejor cazador, su madre los desterró del clan pero se negaron a irse y por poco la disputa se convierte en una guerra interna.

Alzó la mirada encontrándose con el alfa Stilinski, quien se encontraba en la acera de frente. Caminó hasta él con una ligera sonrisa, estaba nervioso, Mieczyslaw era atractivo pero también imponente y sentía que debía deberle respeto pero también tenía su orgullo así que no inclinaría su cabeza.

— Hale.

— Me llamo Derek, cuando me dices así me siento mis padres o en el instituto. — bufó el menor.

Una ligera casi imperceptible sonrisa adornó por un momento el rostro del lobo.

— Algo te esta molestando.

— Yo pienso que más bien aquí lo raro es que estés lejos de tu manada, pero no soy nadie para juzgar. Te digo algo vamos por un café, yo invitó. — le dijo el humano comenzando a caminar.

El castaño podía dejar a Derek solo pero solo lo siguió, ese chico era extraño.

Llegaron a una pequeña cafetería, la cual estaba casi vacía. El castaño no pudo evitar alzar una ceja, él iba a esa lugar de manera regular porque la mayoría del tiempo se encontraba vacía y así no tenía que encontrarse con nadie o tener que hablar más de lo que quería.

— Es un lugar tranquilo, me imaginé que no te gusta estar rodeado de personas. — se sentaron en una mesa bastante apartada — Hace unos años conocí a un lobo que me dijo que los olores y las emociones de las personas podían ser bastante abrumadoras, no dude ni un momento en creerle, no puedo imaginarme a que huelen todas las personas, si yo sé que huelo a ansiedad y a veces a algo agrío, eso fue porque me lo dijo este lobo, no me imaginó como sería la concentración de varios como yo y que huelan de otra manera. ¿Hay manera de apagar eso o que no huelan? Esa pregunta fue algo estúpida, no es como si pudieran apagar sus sentidos, nadie puede. — miró al alfa con un ligero sonrojo, pudo ver una ligera sonrisa en su rosto — Lo siento, suelo hablar mucho cuando me intereso en un tema y la verdad ustedes, los sobrenaturales, me parecen lo más fascinante e increíble que ha existido en el mundo. — dijo Derek susurrando lo último.

A Stiles le parecía tierno y chistoso el que el humano no haya dejado de hablar, también se sorprendió bastante al saber lo que opinaba de las personas como él, no muchos tenían buenas opiniones de los sobrenaturales, ya que los seres humanos suelen temerle a aquello que es diferente y desconocen; pero este pequeño humano y cazador es bastante peculiar.

— El lobo que te dijo eso no mentía, para muchos sobrenaturales es normal estar rodeado de tantas personas y aprenden a ignorar todos los olores, pero eso sucede normalmente solo con los que han crecido rodeados de humanos que no controlan sus emociones. — tomó un sorbo de su café — En mi caso, yo crecí rodeado de lobo y los humanos que había y hay en la manada crecieron controlando sus emociones y es muy raro que su olor nos afecte o sea molesto; como te imaginarás no salgo mucho del bosque o la mansión, solo vengo al pueblo de vez en cuando pero no me guata estar rodeado de muchas personas, sus emociones son demasiadas para mí. — miró al humano de una manera un poco más suave — No tienes que disculparte con nadie por como eres y la verdad apreció que opines tan bien de los míos, la mayoría de los humanos no lo hace. — le dijo Stiles de manera más tranquila.

Derek podía ver que el alfa no era tan frío, ese hombre frente a él solo merecía la felicidad y estaba dispuesto a ayudarlo desde ese momento.

— Gracias. — miró a un lado con un leve sonrojo adornando su rostro pero después su rostro se volvió serio. Tenía que decirle lo que había escuchado de su padre — Alfa Stiles, tengo noticias y no son buenas. Mis padres estuvieron hablando con mi hermana y mi tío, al parecer Gerard y Kate vienen al pueblo. — retrocedió un poco al ver los ojos carmesí del lobo — Tranquilo yo también los odio bastante. — tembló levemente — Así que te ayudaré en lo que necesites, no planeo dejar que lastimen a tu manada de nuevo.

— De acuerdo, trabajaremos juntos.