V: El cementerio de Raven Town ★

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El cementerio de Raven Town, al fin lo conocerás.

El lugar donde se enterraba a los mayores del pueblo cuando llegaba su hora de partir de este mundo.

Siempre pensé que el cementerio sería solo para los adultos mayores, pero el día del entierro de Alicia, todo eso cambió.

Al menos eso creían los habitantes de tan sencillo pueblo, los tres días de los entierros de los chicos desaparecidos, fueron enterrados tres ataúdes vacios.

Fueron uno tras otro, el pueblo apenas se recuperaba de una muerte y llegaba otra en cuanto todo se calmaba. Fue una época difícil para todos los que vivíamos ahí, en el día sólo salíamos para asistir al instituto y volvíamos a casa en cuanto terminaban las clases. Nuestros padres, preocupados por nuestra seguridad, no nos permitían salir ni un minuto, e incluso la policía puso un toque de queda luego de la desaparición de Timothy: después de las 7:00 pm estaba prohibido pasear por las calles de Raven Town para todos.

La policía no quería arriesgarse, el alcalde tampoco, así que el toque de queda funcionaba para todos los residentes de Raven Town, incluyendo a los guardias, como el señor Darren y Emily, la chica que custodiaba la biblioteca por las noches.

El día en el que Beck y yo visitamos a los chicos de nuevo, tomé mi mochila y me puse los zapatos para ir con Beck. Bajé lo más rápido que pude y encontré a mi madre en la cocina untando aderezo a una rebanada de pan.

- Hola Lisa, ¿desayunas? -dijo alzando su mano y mostrándome un sándwich.

- No mamá, lo siento, quedé con Beck para salir hoy -dije tomando las llaves de la encimera de la cocina.

- Está bien, vas a desayunar de todas formas -dijo con una sonrisa metiendo los sándwiches envueltos en una servilleta a mi mochila.

- Está bien, te quiero, vuelvo tarde- mencioné saliendo apurada de la casa.

- Ve con cuidado -gritó antes de que cerrara la puerta y afirmara con un asentimiento.

Salí de casa y fui camino a Raven's Store para encontrarme con Beck. Me gustaba caminar por el pueblo en esas fechas, todo estaba decorado con luces de colores, adornos para anunciar que Raven's Fair se acercaba y alguno que otro artículo de decoración en las tiendas.

Más tarde legué a Raven's Store y Beck estaba ahí, se veía algo nervioso. Siempre se ponía raro cuando llegaban las visitas al cementerio. Cómo si tuviera miedo, o angustia, o tal vez culpa.

- Hola Beck -dije acercándome a él.

- Hola Lisa -me saludó en un pequeño abrazo.

Nos separamos y entramos a la tienda antes de ir al cementerio. Beck tomó dos jugos de manzana y yo un paquete de frituras (vaya desayuno). Pagamos todo a Trent, el compañero de trabajo de Beck que lo cubría los fines de semana y salimos de la tienda después de tomar todo.

Caminamos por las decoradas calles hasta llegar a un pequeño y simpático parque, el parque donde nos conocimos. Nos sentamos en unas bancas marrones de madera que había en el parque desde hace muchos años y empezamos a desayunar. Le di uno de mis sándwiches a Beck mientras el me decía:

- Sólo espero que ésta vez no me lances una roca a la cabeza -rió y me pasó un jugo.

- No te subas a mi columpio entonces -dije entre risas aceptando el jugo de manzana, mi favorito.

- ¿Cómo estás con todo esto? -empecé- ¿Estás bien?

- Si Lisa, no te preocupes, está todo bien con eso. Yo también quiero saber que pasó -dijo en un tono bastante tranquilo.

El diario de Lisa Morgan (En actualización) Where stories live. Discover now