La casa de los Keys era, ¿Cómo decirlo? Muy acogedora. ¿Alguna vez has estado en una casa donde parece que todo es alegre? Una casa donde no puedes imaginar a alguien peleando, a alguien enfadado. Pues así era la casa en la que vivía el oficial Keys.
Después de recolectar evidencia de los otros chicos, Beck y yo decidimos buscar algo de Jason que nos ayudara a encontrarlo. Así que ahí estábamos. Parados frente a la llamativa puerta de su casa para entrar y sacar algo que nos sirviera de Jason.
La señora Keys se acercó a nosotros desde la puerta del garage con una caja que se veía pesada en las manos. Beck se apresuró a ayudarla y nos saludó a ambos.
La señora Keys era muy reservada. Desde que Jason se había ido, ella se había alejado de las personas y a mantener su espacio con todos. Era una mujer de piel blanca, que siempre vestía ropas frescas y tenía el cabello de tono castaño, a diferencia de su esposo, el jefe Keys, que en sus años de juventud, su cabellera canosa era pelirroja.
- Gracias Beck, estás cajas pesan más que un elefante, se lo digo a Martin pero dice que exagero -dijo con un ligero suspiro de cansancio.
Bien, ya tenía la excusa perfecta.
- Hola señora Keys -dijimos Beck y yo.
- ¿Qué los trae por aquí? -preguntó sacudiendo sus manos con pequeñas palmaditas dejando ver el polvo que había en las cajas.
- Queremos ayudarles -dije con una falsa sonrisa -. Mis padres no están en el pueblo y este año no haremos nada para Raven's Fair.
- Pero cada familia debe poner algo, ¿Tú no harás nada? -preguntó extrañada la señora Keys.
- Comúnmente es con mis padres, pero este año estaré con los Anderson -mentí para no hacer obvio nuestro plan.
- Oh, ya entiendo, ¿Y por qué no van a ayudar a la señora Anderson? -decía cada vez más extrañada, no había pensado en eso.
- Mi madre no pondrá nada hasta más tarde, es cuando iré la a ayudarla -intervino Beck.
- ¿Hará los pasteles de siempre? -preguntó mirando a Beck con una sonrisa en su rostro.
- Si, y otras cosas nuevas. No puedo ayudarle, sabe que nadie se mete entre ella y un platillo -dijo Beck haciendo reír a la señora.
- Muy bien, pero solo un poco y más tarde van con la señora Anderson a ayudarle -dijo levantando el dedo índice al momento en que decía cada palabra.
- Si señora Keys -dijimos y le pidió a Beck que llevara una mesa desarmada.
Hicimos todo lo que nos pidió y al llegar al garage vimos al oficial Keys sellando con cinta algunas cajas de cartón.
- Hola chicos, ¿Qué los trae por aquí? ¿Algún problema? -preguntó con un aire de preocupación en su rostro.
No queríamos más desapariciones o asesinatos.
- No es nada malo, Lisa y yo nos ofrecimos a ayudarles con sus cosas para Raven's Fair -explicó Beck, diciendo de paso lo de su madre para evitar más preguntas.
- Oh, bien. Ayúdame con la mesa muchacho -dibo entonces el oficial para empezar a llevar cosas al auto.
Se la llevaron cargando cada uno sosteniendo un lado de la mesa. Me quedé viendo cómo a Beck se le tensaban los músculos de los brazos al flexionarlos para cargar la mesa. Aparté la mirada ruborizada y tomé una caja que ponía con un marcador negro "Decoración Raven's Fair" para llevarla al auto con la señora Keys.
- Lisa, ¿puedo pedirles algo más? -preguntó la señora Keys.
- Si, lo que quieran -respondí poniendo la caja junto a las demás para luego apartar los mechones de cabello de mi cara.
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El diario de Lisa Morgan (En actualización)
Mystery / ThrillerQuerido diario: ¿Cómo puedo resolver un crimen? ¿Qué haces aquí? Esto es un diario, no deberías estarlo leyendo. Pero, ya que estás aquí... me gustaría advertirte sobre todo lo que puedes encontrar aquí escrito. No es un diario sobre mí, al menos no...