one shots nwjns !!

[ madmakz; memorias ]

Luego de que la escuela haya terminado para ambas, y haberse encontrado en el parque para salir, las dos chicas se dirigieron a una biblioteca que adoraba Minji. Todos los días iban allí luego de que salieran de su respectiva escuela y se leían algunos libros. Era el turno de Minji de leerle un libro a la menor, y escogió uno de fantasía.

El tiempo transcurrió en la voz de Minji resonando por la biblioteca vacía, donde sólo ellas dos se encontraban. Hyein cerraba los ojos e imaginaba todo lo que salía de la boca de Minji. El libro había terminado, y el final no conformó mucho a la pelirroja.

— "...y vivieron felices para siempre. El Fin." —Minji azotó la pasta del libro, para así cerrarlo.

— Ugh, ¿en serio? —preguntó Hyein, fastidiada.

— ¿Qué?

— Siempre termina así. —dijo Hyein, cruzándose de brazos y desviando su mirada hacia un lado.

— ¡Esa es la mejor parte! No importa que pase, siempre estarán felices al final. —dijo Minji, con una sonrisa.

— ¿No te aburres de aquello?

— ¿Preferirías que terminaran y odiarse a sí mismos al final?

— Pues, es más realista...

— No lo entiendes. No es divertido si es realista.

Hyein permaneció en silencio.

— ¿Tú crees que seremos felices para siempre? —preguntó Hyein, levantando la mirada.

— Claro que sí.

— ¿No tienes miedo?

— ¿De...? —la mayor estaba un tanto confundida.

— Ya sabes...

— No, no lo sé.

Hyein jugaba con sus manos nerviosa.

— ¿Qué tal si nos cansamos de la otra? ¿O si algo le pasa a una de nosotras? ¿O-

— No eres divertida. —interrumpió Minji, negando con la cabeza.

— ...¿Qué?

— Si te la pasas todo el día pensando en cosas malas que puede que pasen en el futuro, te perderás de todas las cosas que pasan en el presente. —dijo Minji, agarrando el hombro de la menor como apoyo.

— Dime una cosa buena que te haya pasado hoy. —dijo Minji.

Hyein pensó por un rato. La verdad es que no sabía que responder. Minji entendió, y no la presionó. Esperó el tiempo que fuera para que contestara honestamente. Pero fue demasiado.

— Eres muy mala en esto.

— Cállate... —regañó Hyein.

— Pues en fin, no hay porqué preocuparse ahora. Haremos eso cuando llegue el momento. —dijo Minji, ofreciéndole una sonrisa cálida, siendo correspondida por Hyein— Sólo quiero disfrutar estar contigo.

Hyein no contestó. Minji entendió y dejó el libro en su estante correspondiente.

— ¿Quieres escoger un libro? —dijo Minji, sonriendo.

— ¿Qué tal este? —dijo, por fin, Hyein, eligiendo el libro que más le llamó la atención.

Minji comenzó a leerlo, y después de terminar, Hyein habló.

— Eres algo bueno que me pasó hoy.

— Que cursi te pones de la nada. —dijo Minji riendo y golpeando suavemente el hombro de la menor.

— Sígueme pasando por favor. —dijo Hyein, acariciando su hombro.

— Lo haré. —dijo Minji entre risas suaves— Te quiero.

Hyein sonrió, agarró el libro que estaba en las manos de Minji y lo colocó en el estante. Al hacer eso, se sentó y miró a la contraria.

— Gracias. —fue lo ultimo que dijo. Estaba realmente agradecida de tener a alguien como Minji en su vida.