Capítulo 14

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La familia estaba sentada en el comedor esperando que Alejandra se reuniera con ellos para cenar juntos.

C: segura que estas bien, que te dijo el doctor.

Ana: que descansará que solo fue el susto y algunos raspones.

C: yo creo que no deberías de irte a los ángeles, siento que deberías quedarte aquí a descansar.

Ana: estoy bien además así me estuviera muriendo no pienso dejarle el camino libre a Ale para que me gane.

Ale: no necesito ventajas para ganarte.

Todos voltearon a ver a Alejandra, que vestía una mini falda de mezclilla que dejaba ver sus piernas torneadas y una blusita de tirantes blanca.

Ale: disculpen la demora, pero me estaba cambiando de ropa quise ponerme cómoda - Alejandra sabía que ese tipo de ropa provocaba a Ana pues cada vez que se la ponía su hermanastra no podía evitar mirarla a cada rato

M: no hay problema princesa, aun no empezamos a comer.

Alejandra optó por sentarse a lado de su hermanastra, algo que extraño al resto de la familia pero lo pasaron por alto.

C: Ale, ya saben que día van a regresar de los Angeles?

Ale: no se, quizás como por el miércoles o jueves... Todo dependerá de lo que pase en la junta que tenemos.

C: eso significa que no pasaras tu cumpleaños con nosotros.

M: si quieres puede ir sólo Ana y así pasas tu cumpleaños aquí en casa.

Ana: si claro, Ale yo con mucho gusto voy en representación de las dos - le sonrió.

Ale: no es necesario, gracias por la oferta.

C: entonces quieres que lo celebremos mañana antes de que se vayan o bien cuando regresen.

Ale: prefiero que sea al regresar, mañana tengo que arreglar mi maleta y verificar que no se me olvide nada.

C: bueno, espero que al menos traten de llevarse bien las dos por favor.. El saber que van las dos juntas me tranquiliza.

Ale: no te preocupes, traeremos de no discutir... Verdad Ana - dijo acariciando su pierna.

La acción de Alejandra tomo desprevenida a Ana que casi derrama el jugo que estaba bebiendo, logrando que sus padres la voltearon a ver.

M: estas bien.

Ana: ehh este si, es que me mordí la lengua. - sonrió nerviosa y volteando a ver a su hermanastra tratando de decirte que estaba haciendo.

Alejandra decidió ignorarla y siguió moviendo su mano dejando caricias en el muslo de Ana, algo que no solo ponía sus nervios de punta también  lograba excitar a la pelinegra.

Ale: por cierto mamá, hable con mi papá Fernando quiero aprovechar que estaré en Estados Unidos para ir a visitarlo... No se si ustedes tengan algún inconveniente. - hablaba mientras su mano iba moviéndose cerca de su entrepierna.

C: cómo tu desees. - le sonrió

Ale: no se si me necesites en la fábrica papá solo será por unos dias.

M: por mi no hay problema hija, puedo arreglarmelas por unos días.

Alejandra no dejaba de mover su mano logrando que su hermanastra estuviera a punto de colapso nervioso, ahora aprovecho que Ana no sabía que hacer para retirar la manos de Alejandra, ya que su cerebro no lograba coordinar para ella era como un sueño o una pesadilla, así que Ale empezó a frotar sobre la erección de su hermanastra que gracias al mantel sus padres no lograban ver lo que pasaba debajo de la mesa.

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