Compañera de juegos (Enzo Fernandez)

Capitulo 9

Hoy Enzo me iba a acompañar a la clase de los mayores. Estoy nerviosa porque desde lo que paso en casa el finde no lo ví más. Me siento mal porque en parte yo lo provoque, y él también tiene sus culpas porque también lo hizo.

Si está con Valentina, sea buena o mala relación, yo no quiero interponerme. Aunque tampoco es interponerse porque no hay nada sentimental, es solo físico.

Igual no dejo de ponerme nerviosa, pasamos una línea sarpada.

Salí de casa encontrándome con Enzo en la puerta con la mano en alto, para tocar.

- Buen día profe. -murmuro pasándose la mano por el.. se rapo. Está rapado y no saben lo que le está haciendo a mi interior, capaz se me explotó algún órgano, no me puede poner así dios.

- Buen día Enzo. -me quiero hacer la fuerte, pero estoy muy nerviosa. Las manos me tiemblan y me agarró de las correas de la mochila para que no se note.

Empezamos a caminar y cuando llegamos a la zona de ascensor/escalera, yo doble hacia las escaleras y Enzo hacia el ascensor, provocando que nos choquemos. Mis manos quedaron apoyadas en su pecho, y él por su parte tenía los brazos extendidos a mis costados. No podía dejar de mirar su pecho, moví mis dedos sintiendo la tela bajo mis yemas.

- Perdón. -hablo él primero y yo me aleje dos pasos casi chocando con la pared.- Pensaba que ibas a ir por el ascensor. -se rasco la nuca con nervios.

- Pensaba que ibas a ir por las escaleras. -señale sin mirarlo.- Vamos por dónde vas siempre. -hable comenzando a bajar las escaleras, pasando por un lado de él.

Sentía su mirada en la espalda, no quiero ponerme más nerviosa porque me pongo boluda.

De pronto su mano caliente y firme tomo mi muñeca haciéndome girar.

- Ya sé que soy un desubicado por lo del otro día. Perdón. -mire sus ojos chinitos que estaban inspeccionando mi reacción.

- No pasa nada. -fue todo lo que dije y seguí bajando. El corazón está latiendo en mi garganta, es que solo con que esté en frente mío me hace flashar cualquier cosa. Lo quiero, quiero tenerlo adentro mío.

Terminamos de bajar las escaleras y subimos a su auto, yo saqué una agenda viendo lo que teníamos que hacer hoy en la clase.

Hablamos poco y nada en el auto, la relación estaba medio incómoda. Pero es obvio, casi garchamos hace unos días. Y vio mis tangas y juguete.

- Buen día. -hable hacia mis alumnos, la mayoría tienen diecisiete, pero hay varios de uno o dos años más.- Hoy les tengo una linda sorpresa.- Enzo estaba encapuchado y sentado en una silla atrás mío.- Se que les va a gustar, pero no sé avalancen ni hagan boludeces. -les adverti. Enzo se levantó sacándose la campera y caminando hacia nosotros. Las caras de los chicos eran digna de una foto.

- Buen día chicos. -hablo frotándose las manos. Instantáneamente todos corrieron a abrazarlo, pedirle fotos y.. ¿Manosearlo?

- Yamila, la mano por favor. -adverti cruzada de brazos, ella saco la mano del pecho del jugador. Por fuera me reía, pero por dentro estoy hirviendo de los celos.

Me molesta saber que es más seguro que salga con una chica más joven y no con unas más grande, Yamila especialmente tiene 19, no se llevan nada con Enzo. No sé nota la diferencia. Pero si lo comparan conmigo se vería horrible.

La segunda vez que ví una mano tocar más allá de sus manos toque el silbato, Enzo ni se percataba de lo que le hacían.

- Vamos a comenzar con la clase chicos. Se nos va a pasar la hora. -mire mi reloj.