Capítulo 32: Con los nervios a flor de piel.

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Muy bien. Las cosas estaban así...

Número uno: Bible había hecho un viaje al pasado para tratar de analizar la situación en que me había encontrado antes de ser secuestrado y tratar de hallar alguna pista de mi paradero, cosa que no sirvió de mucho.

Número dos: Lo hizo sin pedir autorización a los otros Dioses.

Número tres: La única que estaba enterada de todo era Deméter, pues ella le dio la gema de su anillo para que pudiera viajar.

Número cuatro: Aquello tenía cerca de un mes de haber ocurrido, y a pesar de que los Dioses se habían enterado desde el preciso instante en que Bible viajó, fue hasta apenas este momento que todos pudieron reunirse al mismo tiempo.

Número cinco: Ahora teníamos que ver a los otros Dioses para que Bible explicara la situación, o como él mismo lo llamaba, para que tuviera un juicio.

Y número seis: No habíamos tenido ni una sola noticia acerca de Mile desde que huyó con Apo, por lo que cuando nos reuniéramos con los demás, habría que explicar la traición, y eso no ayudaría a defender a Bible.

Ahora yo estaba en mi habitación tratando de vestirme para la ocasión. Por primera vez desde hace mucho, mucho tiempo, me puse un traje. Era de color negro con detalles blancos, e incluso me había tomado la molestia de peinar adecuadamente mi cabello.

Todo para dejar una buena impresión a los Dioses que conocería, pues tenía que demostrar que tenía madera de líder y cabeza para encargarme de las estaciones.

Caminé hasta el jardín y esperé a que Bible se reuniera conmigo. Jeff llegó antes.

-Luce usted muy bien, mi señor- dijo, sonriéndome -Como un Dios.

-Gracias- me eché a reír -Es el mejor halago que me han hecho en la vida.

Acompañó mis risas y después tomó asiento a mi lado en una de las bancas de madera.

-Va a ser una reunión bastante complicada- suspiró -Hay muchas noticias y cambios que hay que comunicar, por eso era inevitable que llegara este momento. Me atrevo a decir que incluso se habían demorado en reunirse.

-Jeff, ¿crees que estás listo para hacer esto?- ladeé la cabeza y lo miré.

-Tengo que estarlo. Viajar no es opcional. Y cuando pidan mi versión de lo sucedido, tendré que ser honesto y confesar que hemos sido traicionados- bajó la mirada cuando sus ojos comenzaron a aguarse –Traicionados...-soltó una risa amarga –No puedo creer que haya sido por parte de mi mejor amigo- sacudió la cabeza con pesar, luego se levantó y con la cabeza gacha, comenzó a caminar con las manos en los bolsillos.

Respiré hondo, y dejé que tuviera unos minutos a solas antes de marcharnos.

Justo cuando me puse de pie, las puertas de la mansión se abrieron y Bible salió por ellas.

Por primera vez desde que lo conocí, lucía como lo que era: Un Dios.

Tenía puesto un traje azul oscuro con zapatos y camisa negras, la corbata era del mismo azul brillante. Llevaba su corona, esa que era de un color plateado que tenía engranes y manecillas, girando y moviéndose sin parar. También tenía una capa negra encima y su bastón en la mano derecha. Sus ojos eran de un azul muy, muy claro. Y su cabello negro estaba perfectamente peinado, sin un solo mechón fuera de su sitio.

-Whoa...- no pude evitar decir –Realmente luces... Es decir, te ves como...si fueras...

-¿El Padre Tiempo?- asentí efusivamente y el soltó una risita -Sí, bueno... Es que esta es una ocasión especial, por lo que hay que lucir especialmente impecables.

El Nuevo Preceptor ࿐  [ BibleBuild ]Where stories live. Discover now