DxD: Rompiendo los límites del Critical

Capitulo 31

Lo gracioso era que probablemente había una diosa que tenía poder sobre la gravedad.

Esas palabras fueron suficientes para hacerle recordar para qué la llamó aquí. Y una vez que se lo sacara del pecho, no tendría que contenerse más con ella.

"Claro, claro", Kaito puso los ojos en blanco, "Eso me recuerda por qué quería hablar contigo aquí arriba".

Su sonrisa no disminuyó en absoluto, "¿Quieres decir que no es solo porque llegaste a un punto de ebullición con el fanservice que te di ayer y quieres inclinarme sobre la barandilla y darle una paliza a mí trasero?"

Esta chica realmente no tenía vergüenza en absoluto.

"Creo que eso es más lo que quieres en este momento", evadió hábilmente, por el momento. Sin embargo, definitivamente era una imagen muy, muy tentadora, solo una en la que no se concentraría... por este momento, "No, pero volveremos a eso. Solo saldré y lo diré, arrancarlo como una tirita. Porque si alguna vez quiero hacer algo de eso contigo, mereces saber la verdad".

Él esperaba que ella hiciera otra broma, pero sorprendentemente, ella se quedó en silencio y siguió mirándolo a través de su flequillo.

"Lo sobrenatural es real", soltó la bomba allí mismo, sin andarse con rodeos, "Dioses, demonios, dragones, magia. Las obras, todas son reales".

Silencio.

Por unos momentos se miraron a los ojos. Kaito esperaba que ella se riera de él, tal vez lo llamara loco, posiblemente incluso se preocupara un poco de que se había estresado demasiado y estaba un poco loco.

En cambio, solo lo miró fijamente esos pocos momentos preciosos que parecían durar toda la vida.

"... Huh..." pronunció, antes de asentir una vez, "Lo sé". Ella admitió.

¿Qué mierda?

"¿Sabes?" parpadeó, levantando las cejas con sorpresa, "... ¿Cómo?"

"Fui atacado por un monstruo cuando era niña, alrededor de los ocho años. Para ser honesta, es un poco borroso, casi muero", admitió Yanagi, "Claro, luego obtuve mi superpoder al azar, mis ojos comenzaron brillando y se aplastó como un panqueque. Pensé que estaba soñando durante mucho tiempo hasta que mis poderes se activaron de la nada un par de veces".

"Huh…" Kaito no estaba realmente seguro de qué decir a eso. No se había esperado todo eso.

"La pregunta es, ¿cómo lo sabes?" Yanagi le devolvió la pregunta.

"¿Porque tengo poderes para hacerlo?" Kaito ya había decidido ser completamente sincero con ella: "Para ser exactos, tengo algo llamado Sacred Gear, dos de ellos en realidad. Esos son básicamente regalos del Dios de la Biblia para los humanos. Y básicamente son una de las pocas formas en que los humanos obtienen poder en este mundo".

"¡¿Eh, Dios es real?!" Los ojos de Yanagi en realidad se abrieron en estado de shock.

"Él... era", Kaito hizo una mueca, "Está un poco muerto ahora".

"... Ah... bueno", Yanagi hizo una mueca, "Eso... eso apesta".

"….Sí…." Kaito estuvo de acuerdo, antes de toser, "¿Y tú?" preguntó, cambiando de tema.

"Ya te lo dije, ¿no?" Yanagi le dio una leve sonrisa, "Soy la diosa de la gravedad". dijo y sus ojos brillaron, pasando de un profundo azul oscuro a un dorado brillante.

Y de repente Kaito sintió una presión sobre sus hombros. Aunque en realidad no era una gran molestia.

"¿Tus poderes son tus estúpidos músculos o algo así?" ella le espetó, ojos dorados brillando casi hipnóticamente, "¡Acabo de aumentar la gravedad tres veces sobre tu cuerpo y ni siquiera te moviste!"