Capitulo IV: Petit Menteur

3.1K 171 18
                                    

Con el descanso entre carreras, la escudería Ferrari aprovecho para invitarme a Maranello y visitar la academia de pilotos de Ferrari, lo cual no tuve problema y acepté de inmediato.

-Mamá, todo va a estar bien, solo es un viaje de tres días-Mi mamá era una persona muy nerviosa y los aviones no eran su cosa favorita.

-Lo sé cariño, sabes que me preocupo por ti-Dijo desde el otro lado del teléfono, si había algo que no me gustaba de las carreras era esto, el tiempo que no podía estar con mi familia.

-Gracias por hacerlo, te amo mama. Te llamaré cuando llegue.

-Ven a visitarnos pronto o tendremos un probl-Colgué el teléfono antes de que empezara su sermón, pero no pasaron ni cinco minutos cuando me envió un mensaje enojado.

El aeropuerto de Maranello era hermoso, lo poco que pude ver de la ciudad de camino al hotel me pareció increíble. La estructura, los colores y la gente cantando y bailando en las calles.

Con el equipo de Netflix grabamos unas escenas, porque, aunque quisiera, no me pude librar de ellos, sus palabras fueron "Somos tus sombras".

El hotel tenía algunos fans con los cuales me tome todas las fotos que pidieron, ya que no eran muchos. El camino a mi habitación era largo porque estaba en la última habitación.

Deje mis maletas y cambie mi ropa por una más cómoda, una chaqueta, una gorra y un cubrebocas. A pesar de que el COVID ya había pasado, lo utilizaba para ocultar mi cara y que la gente no me reconociera tan fácilmente.

En Google Maps busqué un restaurante de comida rápida y me dirigí hasta allí. Pedir la comida fue lo más fácil del mundo y en estos momentos agradecía haber aprendido italiano.

Con mi comida en una bolsa, empecé a caminar de regreso al hotel, la gente en las calles de Maranello lucia tan despreocupada, todos compartían sonrisas.

Una vibración en mi pantalón, me saco de mis pensamientos y conteste el teléfono.

-Hola, Olivia

-Jules, uno de los recepcionistas, tiene un mensaje para ti, pero dicen que no contestas en tu habitación ¿Estás bien?

-Lo siento, es que vine a buscar comida-Una risa salió de mis labios y podía jurar que ella estaba negando con su cabeza en ese momento.

-Tranquila, le diré que pasaras después. Nos vemos.

Justo cuando me iba a despedir, mi cuerpo choco con la espalda de alguien y por el impacto termine cayendo al piso.

-Mi dispiace tanto, ero distr-Rápidamente me empecé a disculpar, pero cuando levanté la mirada del piso, las palabras se fueron de mi boca.

-¿Jules?

-¿Charles?

Las palabras salieron de nuestra boca al mismo tiempo, creo que ninguno de los dos los podía creer. Él me tendió su mano y me ayudo a levantar.

-Creo que lo nuestro son los accidentes, ¿no?-No pude evitar reírme, él también estaba riendo y por un momento se me olvido todo.

-Si fueran encuentros normales, serían muy aburridos.

-Tienes razón, Petit menteur-Él recogió mi comida del piso y al verla arruinada la tiro en la basura-¿Qué estás haciendo aquí en Maranello?

-Ferrari me invito a visitar su academia de pilotos y acepté-Él se quedó unos segundos en silencio como si su cabeza estuviera uniendo piezas-Por cierto, creo que me debes una cena.

-Entonces vamos a darte el mejor platillo de Maranello, Petit menteur-Su mano tomo mi muñeca y me arrastro hasta un carro que no estaba tan lejos de nosotros.

Llegar a la metaWhere stories live. Discover now