REIGN: Destino | Taekook | #2

"Cᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ ᴅɪᴇcisiete"

Los días se volvieron semanas y las semanas se volvieron meses. Pasaron rápido, casi en un parpadeó, pues todos estaban inmersos en sus asuntos. Taehyung como siempre trabajaba casi sin parar, Jungkook por su lado se sumió en estudios, pinturas y comida.

Las sirvientas comenzaban a ver a Jungkook de nuevo en todos lados, sorprendidas de que hubiera vuelto cuando realmente nunca se había ido.

Durante sus días, Taehyung y Jungkook compartían desayunos, almuerzos y cenas que al principio fueron difíciles de sobrellevar por la tristeza con la que Jungkook lidiaba. Incluso era difícil que tomara baños por los horribles recuerdos. Pero poco a poco las cosas volvieron a la normalidad e incluso fué mejor.

Mañanas perezosas y noches llenas de charla, una a una fueron pasando hasta que febrero llegó y junto a la nieve que se derretía y se marchaba, Jungkook dejaba su niñez atrás. La mañana de su cumpleaños se despertó antes que Taehyung y corrió en busca de Jiyook. La hizo bañarlo, vestirlo y hacerlo lucir tan guapo como estuviera en sus manos para impresionar al Rey y que notara que ya no era más solo un niño.

Pero la ropa y las joyas solo eran adornos, pues aunque Jungkook aún tenía un aire infantil el cambio en él había sido drástico. Se había estirado dos o tres centímetros más. Su cuerpo había tomado curvas notorias y músculos suaves y pomposos en donde antes solo había delgadez. Su rostro seguía siendo joven y redondo, con sus mejillas rosadas rellenas al sonreír. Su cabello había crecido hasta sus hombros, pero había insistido en cortarlo de nuevo para que no estorbara. Había dejado de lucir más como un niño para lucir más como un adulto joven.

-¿Qué crees que dirá Taehyung?

-Jungkook, ya te lo he dicho, Taehyung ha notado que ya no eres un niño.

-Si, pero hoy es definitivo, nana.-Jungkook la miró a través del espejo con obviedad.-Cumplo dieciséis. Es importante para todos.

-Lo es.-Jiyook admitió acomodando su camisa negra.-Te prepararé algo especial. Es tu primer cumpleaños en el castillo.

-Ah, no, no quiero nada.-Jungkook se miró a sí mismo dando vueltas.-Nunca tuve nada en mi cumpleaños así que estoy bien.

-Por supuesto que no.-Jiyook se cruzó de brazos.-Ya lo dijiste, es importante. Así que tómate el día, no hagas nada y disfruta en los jardines después del desayuno.

-Mejor iré a ver a Taehyung.-Jungkook bajo emocionado de la plataforma en la que las costureras le median la ropa a Taehyung y a él de vez en cuando, cuando el Alfa lo ordenaba y miró a Jiyook con ilusión.

-¿Es acaso él el cumpleañero?

-¡Estoy tan emocionado!-Jungkook la tomó de las manos y dió un par de cortos saltos.-Le daré un beso, un beso en la boca. No como los picos que me da de vez en cuando ¡Un beso real! Que demuestre lo apasionado y enamorado que estoy por el.-Jungkook rió mostrando todos sus dientes.

-Jungkook, que sinvergüenza me has...

-¡Y esta noche haremos el amor!-Casi grita alejándose de Jiyook hacia la puerta.-¡Al fin! Quizá no espere a esta noche, quizá ahora mismo.

-¡Jungkook!-Exclamó Jiyook indignada, pero el ya se había ido.

Jungkook corrió por los pasillos sin importarle hasta llegar a su habitación, buscando a Taehyung bajo las mantas sin éxito. Dió un brinco de susto cuando una Beta salió del baño. Jihyo hizo una reverencia.

-Hola, Alteza. El Rey está tomando un baño.

Jungkook arqueó una de sus cejas con una ola de celos amenazando con azotar su cuerpo, pero Jihyo negó de inmediato al percibirlo.