Capítulo 21: "Eres tan terco"

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☆♛☆ 21. "Eres tan terco" ☆♛☆


—Al fin vienen. —Rei se sujeta a los brazos de la señorita Thompson apenas cruzamos la puerta—. Sálvenme. —La abraza.

—¡Tía! —Al menos cinco niños corren hacia nosotros y la empiezan a jalar de la camiseta—. Vamos, es tu turno.

—Ayuden... meeee. —Es llevada a la fuerza a la sala.

La seguimos y nos encontramos con incontables niños corriendo de un lado a otro, bailando o gritando. Y sus padres conversan amenamente como si fuera de lo más normal.

La señorita Thompson me jala del hombro para que me incline a su lado y se coloca de puntillas hacia mí.

—Lleva la torta a la cocina sin que se den cuenta, yo los distraigo —murmura tan cerca que su aliento roza mi oído.

En cuanto se separa entra al tornado de pequeños y se une a Rei en un juego que no llego a comprender.

Dirijo mi mano izquierda a la oreja y toco el borde en donde sentí el roce. Sé que solo se trató de su aliento, pero igual me provocó un extraño cosquilleo.

Respiro hondo y voy a la cocina a resguardar el pastel. Freno en cuanto veo a Jack sentado en una esquina junto al refrigerador y abrazándose las piernas. Cruzamos miradas y la mantenemos por tres segundos. Aparto la vista para enfocarme en la petición de la señorita Thompson y guardo el pastel en la parte baja del refrigerador. Una vez cierro la puerta bajo la mirada hasta mi hermano.

—¿Qué haces?

—Shhhh. —Me jala y me obliga a arrodillarme—. Te van a escuchar.

—¿Te estás escondiendo de unos niños?

—No, no. —Sacude las manos—. De sus madres.

Entorno los ojos ya que lo que ha dicho tiene menos sentido que lo que yo dije.

—Al parecer solo han venido los niños con padres separados y se me pegaron como chicles apenas llegaron. —Sacude la cabeza para olvidar traumáticos sucesos que deben haber ocurrido en nuestra ausencia—. Usualmente Maya me ayuda a alejarlas con su forma de ser tan directa, pero dijo que tardaría al menos una hora en llegar.

—Y aún te cuesta rechazar a las personas.

—Si hay algo que no extraño del modelaje es recibir demasiada atención de las mujeres... y algunos hombres. —Suspira bastante desanimado.

—Vamos. —Lo sujeto del brazo.

—Pero... —Me enseña sus ojos de cachorro.

—Yo me encargo. —Lo ayudo a levantarse.

Salimos de la cocina y no tardo en percibir varios acercamientos de las susodichas. Me coloco frente a él y miro a los ojos de la mujer que está más cerca de nosotros. Ella frena, evita la mirada y desvía su camino. Las otras la imitan y fingen que no existimos.

—Tienes que enseñarme a hacer eso. —Jack asoma su cabeza por mi derecha.

—Imposible, eres demasiado blando.

—Tienes razón. —Sonríe con orgullo y me rodea el cuello con su brazo—. No me despegaré de ti en toda la noche.

—Solo hasta que llegue Maya.

Rei logra librarse de los pequeños ya que la señorita Thompson la cubre, y se coloca junto a nosotros.

—¿Pueden ir repartiendo los bocaditos? Yo iré a refrescarme un poco. —Palmea mi espalda y se aleja arrastrando los pies hacia el baño.

Conde herpes [Futuro MVDH #1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora