Capítulo 34: "Mis puños te van a esperar"

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☆♛☆ 34. "Mis puños te van a esperar" ☆♛☆


—¡Hermano! —Maya corre hacia mí y la atrapo en cuanto salta.

Mi atención se dirige al muchacho que nos observa sorprendido por la actitud de la ex adolescente.

—¿Me extrañaste? —Se aparta un poco que me permite ver su rostro—. Yo te extrañé muchísimo.

—Sí, lo hice. —La bajo—. ¿Quién es él? —Desvío la mirada hacia el individuo.

—Es Patrick, mi novio. —Sonríe ampliamente.

—Un gusto conocerlo, señor —saluda como si estuviera en el ejército.

¿Me acaba de llamar señor?

Me acerco a él y lo miro fijo a los ojos.

—Hermano, lo estás asustando.

Si se asusta con solo verlo significa que no vale la pena.

—¿Por qué mejor no llevas a Lía adentro? —Rei me entrega a la pequeña, quien sonríe en cuanto nuestras miradas se cruzan.

—Exionista, adivina qué quiero comer. —Me dirijo al interior del establecimiento— ¡Aceitunas!

Mi hermano habla con el encargado y nos guían hacia una mesa vacía.

—Exionista, ¿te gustan las aceitunas?

—Sí, son mis favoritas.

—¡Las mías también! Tenemos tanto en común. —Me abraza el cuello.

Lo sé.

—A ambos nos gusta mamá... a ambos nos gusta la aceituna...

Llegamos a la mesa y la acomodo en la silla que trajeron especialmente para ella.

—Y a ambos nos desagrada el coco.

Me quedo mirándola.

—¿No te gusta el coco?

—Iu, no. —Sacude la cabeza—. Sabe a leche pasada. —Arruga la cara como si le diera asco.

—Cualquiera pensaría que son padre e hija —comenta el tal Patrick.

Todos guardan silencio. Yo volteo a ver al muchacho que me irrita cada vez que habla.

—Cielos, muero de hambre. —Rei se enfoca en la carta que nos ha entregado el sujeto de antes—. Jack, ¿qué vas a pedir? —Lo codea.

—Ah... bueno... —Lee las opciones—. Creo que pediré una lasaña de espinaca al pesto...

—Suena bien, pediré lo mismo. —La ex modelo sonríe—. ¿Qué hay de ti, Maya?

—Que sean cuatro, a Patrick le encanta la lasaña. —Lo señala con el pulgar izquierdo ya que en esa dirección está sentado.

—No tanto como me encantas tú. —Le toca la cara a la ex adolescente.

Patético.

—¿Están listos para ordenar? —pregunta el tipo que acaba de acercarse.

—Exionista... ¿puedo ser tu hija?

—Les daré otro minuto. —El tipo desaparece tan rápido como llegó.

Miro a la pequeña, quien tiene la cabeza gacha mientras juega con sus diminutas manos.

Maya, disfruta de este almuerzo porque será el último que tengas con ese sujeto.

—¿Por qué todos están tan callados?

Conde herpes [Futuro MVDH #1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora