Yo, el Cachorro Favorito de Dios

Parte 124

Sin embargo, la pequeña monja Irene pareció ver una figura caminando aturdida por la ventana colgante antes de entrar al monasterio.

¿Espejismo?

La monjita no quería pensar demasiado, en secreto le contó a Noah sobre sus delirios, y Noah mantuvo su expresión, pero prestó atención a la "advertencia" del psíquico en su corazón.

En el monasterio, las velas parpadeaban, apenas iluminando el lugar donde el sol no podía cubrir. El interior era solemne y solemne, y las diversas estatuas de piedra en las paredes eran antiguas y claras. Las cuatro plataformas de piedra en el salón estaban talladas con cuatro espíritus santos dormidos.

Hay una tableta de piedra imponente en el medio, que parece ordinaria.

Este lugar es obviamente un monasterio, pero no tiene el más mínimo significado sagrado, sino que está lleno de una atmósfera oscura y profunda.

"¿Hola?"

La pequeña monja de repente encontró una figura frente a la estela.

Obviamente no he visto a nadie antes.

La figura estaba encorvada, todo su cuerpo estaba cubierto por el uniforme del monje, e incluso no se podía ver su rostro.

"Por favor, perdone nuestra repentina visita" Irene, como guía, naturalmente confió en ella para hablar con las monjas en el monasterio, pero después de esperar un rato, no escuchó la respuesta de la otra parte, "¿Hola?"

Varias personas apartaron la mirada con cautela de la figura, y Noah incluso sacó la Biblia que había preparado con él.

"¿Qué deseas?"

Llegó una voz ronca y vieja, y el áspero sonido de molienda hizo que la pequeña monja Irene se sintiera un poco incómoda.

"Soy el padre Burke, este es el padre Noah y la hermana Irene, ¿usted es el decano aquí?"

Burke respondió muy inteligentemente y no respondió directamente a la pregunta de la otra parte.

Si esta "persona" está viva, está bien, pero si es un demonio, responderás positivamente a su pregunta.

Entonces felicidades, se establece el contrato y tu alma fue exitosamente vendida al diablo por ti.

"Sí, lo soy, pero, ¿parece que aún no has hecho un voto?"

Estas últimas palabras estaban dirigidas a Irene, quien, como monja, no hizo un voto de por vida, lo que fácilmente podría considerarse impuro.

También es fácil atraer algo.

Capítulo 164 La bendición de Noé

"Todavía es una novicia, la Hermana Superiora".

La voz nítida y melodiosa de Noah pareció calmar el estado de ánimo de las personas. Irene, que estaba un poco asustada, se calmó al instante, y Frankie, que era valiente, también calmó sus emociones.

"Santo hombre, eres muy bienvenido en el monasterio".

El "principal" continuó con su tono inquebrantable, pero el deseo codicioso que se escondía en él fue advertido de repente por la pequeña monja Irene.

¡Hay una putita que quiere robarle a Noah a mi vieja!

¿hombre santo?

El padre Burke y French estaban un poco desconcertados ¿De quién estaban hablando?

Noah sintió dolor de cabeza.

La falta de habilidad psíquica lo hizo incapaz de percibir alguna información oculta, solo la esencia divina le recordó que este lugar era un lugar sucio e inmundo.