Te Seguiré Amando

15.

Hable con mi papá para ir a la casa de los Malfoy.

— a parte de ir a la casa de los Malfoy en vacaciones, ¿Te puedo decir algo más? — pregunté nerviosa

— dime hija — respondió mi papá

— tengo novio — dije con miedo a que me matara, sé que soy muy exagerada, pero es mi papá y obviamente podría matarme sin algún problema, ahora me preguntó cómo reaccionara Sirius

— ¿Novio?, No crees que eres muy pequeña

— no, soy pequeña pero... Madura, he madurado mucho y creo que por lo menos es una buena edad, si quieres obviamente puedo terminar con él

— ¿Quién es el afortunado? — preguntó

— Draco Malfoy — respondí y baje la mirada

— eso... Si que me sorprendiste hija, no me esperaba que Draco Malfoy fuera el afortunado, tendré que hablar con él

— no lo hagas — dije rápidamente y me tape la boca

— ¿Por qué? — preguntó

— no hay necesidad, yo lo amo y él también me ama, me lo dijo anoche y fue tan sincero que no creo que este jugando conmigo — dije nerviosa

— está bien, si tú lo dices, deberás hablar también con Black — dijo

— lo haré, pero mediante cartas — me acerqué y le dí un abrazo — voy a estar bien, además dudo mucho que esto sea solo un juego

— te creo hija, aún así creo que es necesario que haber con Draco

— si quieres hazlo papá — no iba a detenerlo, mi papá es así y creo que está bien que hable con Draco

— lo haré, está decidido — dijo y me sonrió

— esta bien, debería ir a alistarme, te veré después de vacaciones papá — salí de su oficina.

Cuando salí ví a Draco, cerca a la puerta.

— ¿Estabas espiando? — pregunté

— tal vez, ¿Hablaste con tu padre?

— si, acepta nuestra relación — él me agarró la mano y entrelazamos nuestros dedos

— es una buena noticia amor — me sonroje cuando me lo dijo

— solo falta la aprobación de Sirius — dije

— eso será con tiempo, en realidad tu papá tiene más derecho que Black

— lo sé, pero... Aún así sigue siendo mi papá de sangre

— si tú dices

Antes de irnos salimos a caminar por todo el castillo, hablando sobre sus padres, el me dijo que yo les agradarme. Espero que sea así, siendo la hija de un fugitivo no espero mucho.

Llegó la hora de irnos en el tren, estuvimos en un compartimento solos, Draco y yo, recosté mi cabeza en su hombro y dormí casi todo el viaje.

— ya llegamos amor — me despertó Draco

— ¿Llegamos? — pregunté confundida

— si, bajemos del tren, dormiste mucho — dijo y rápidamente pensé en que lo más posible es este despeinada, intenté arreglar mi cabello — te ves bien así de despeinada

Nos acercamos a sus padres, parecían amables, a quién engaño; con esas miradas pueden llegar a matar sin varita. Draco se acercó primero sin mí y después me hizo una seña para acercarme y eso hice.