Capitulo 2 Los perros como tú, a mis pies.

284 23 45
                                    

.

.

.

Bienvenidos a mi mundo irreal.


Piensa como una reina. Una reina no tiene miedo de fracasar, el fracaso es un paso más hacia la grandeza. –Oprah Winfrey.


15 DE JUNIO 2024

Noche del día.

He estado residiendo en el lugar que solía ser mi hogar durante los últimos días, fue difícil regresar, pero estoy aquí y es lo importante. Había anticipado que sería más difícil y que tardarían más en aceptarme. Inconvenientemente como siempre, yo soy un camaleón y sabía lo que realmente querían; que es estar a la par de sus perversiones más oscuras.

No tuvieron problemas con aceptar a mi pequeño hermano, mientras no se haga pública su existencia, y la verdad no tengo problema; ya que esto lo mantiene protegido y cabe aclarar que legalmente es mi hijo.

Sin embargo, sé que la de ella es otra, ha embaucado a todos en esta casa más pronto la cazadora logrará su cometido. Me da risa que ella creyó qué no note todo lo que hace, finge estar alegré, pero está hirviendo de rabia al notar qué todos me aceptaron, al menos casi todos.

Soy la única mujer que la puede y pondrá en su lugar.

Ingreso un pie en el agua y luego el otro para dejar caer mi cuerpo en la tina, el agua cubre mi figura. De hecho, disfruto lo mucho que soporto esto, a pesar de lo caliente que está, es cómo una terapia al igual qué hacerlo con frío. Me gusta poner a prueba mi resistencia. Con esto me siento más limpia, pero no de suciedad, más bien de mis pecados y demonios, esos que están a mi espalda acompañándome siempre.

Me hundo dejando que el agua me tape en su totalidad, aguantando la respiración y sintiendo un ardor en la piel, uno placentero para mí.

Pero siempre se cuelan algunas frases que me marcaron en cierto punto y que ahora se han convertido en mi mayor motor y motivación.

«Eres una niña tonta, qué siempre se mete en todo».

«Vez eso, es tu culpa maldita mocosa».

«Ni siquiera ibas a nacer, quería quedarme con los hijos que tengo, eres una inútil».

«Las mujeres debemos ser más listas, usar todo nuestro cuerpo a favor».

«No me importa si te duele, necesitamos qué se unan con nosotros».

«Deja de llorar qué ya pasó y pronto dejará de doler».

«Mírate, ni siquiera pareces mi hija: no tienes mi cabello».

«Cuando me enteré de qué iba a tener una hija, esperaba que fuera como yo, ¡pero no! Saliste tú».

«Eres débil y noble, esto no te llevará a nada más qué tu perdición».

El aire me falta, pero yo soportaré más, tengo que superar mi récord y recordar mi causa. El verme cerca de la muerte me motiva, lo cual es raro.

Unas manos me suben y tocan mi cuerpo provocando un fastidio, la luz golpea mi rostro y el aire ingresa por mis fosas nasales, observó cada rincón ya qué me siento desorientada. Ella está observándome, reflejando todo lo que quiere preguntar, pero no obtendrá respuestas.

―Niña, pero tú ¿Qué haces? ―dice exasperada.

―Nada, llevaba poco metida ¿Qué haces en mi habitación? ¿Quién te ha permitido pasar?― me levanto de la tina dejando expuesta mi desnudes, ella se gira para no verme.

DepauperarWhere stories live. Discover now