Capítulo 38: Una Nueva Amistad

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Al día siguiente, e incluso en la noche, Diddy y Dixie regresaron otra vez a la casa de su nuevos amigos, muy emocionados de verlos de nuevo. En el día, habían pasado un rato en el exterior, de hecho, habían regresado a casi los mismos sitios del día anterior, aunque esta vez ya no hicieron actividades extremas. De todas formas, con planes tranquilos también la pasaban en grande junto a sus nuevos amigos. Incluso, los llevaron a otros lugares más donde ambos solían ir a pasear y divertirse. Entre ratos, también hacían juegos grupales en medio de sus travesías por la isla, con los que se divertían bastante.

Durante la noche, aunque primero estaban reunidos todos los seis en grupo, en un rato después se dividieron en chicos y chicas. Dixie estaba reunida junto con Mandy y Jenny, mientras que Diddy con Melvyn y Ricky.

Diddy, junto con los otros dos niños, se encontraban en una zona despejada cercana a la casa, jugando al tiro al blanco con unos arcos fabricados con ramas y lianas.

—Es tu turno, Diddy —le dijo Ricky en tono desafiante—. Veamos si puedes acertarle.

—Bien, chequea esto —respondió Diddy preparando su arco y apuntando hacia el centro de un círculo dibujado en un árbol.

Diddy estiró la flecha hacia atrás y la soltó, para después lograr que se clavara justo en el centro del círculo. Luego, disparó más flechas hacia otros blancos que habían puesto, y a todos les acertaba a la perfección, a diferencia de Ricky y Melvyn, que solo llegaban a pocos centímetros de acertar a los círculos centrales. Diddy daba saltos de victoria cuando finalizó su turno, mientras que los otros dos niños se quedaron boquiabiertos.

—¡Wow, vaya que sí eres experto en esto! —exclamó Melvyn asombrado—. Parece que ahora sí te creo que hayas podido pelear contra un rey lagarto junto con tu tío.

—¡Deberías enseñarnos! —agregó Ricky de la misma forma.

—¿Jugamos otra ronda ahora o qué? —les propuso Diddy en modo desafiante.

Los tres comenzaron de nuevo a competir por quién lo hacía mejor, en donde Diddy solía ganar en la mayoría de rondas. Pero así mismo, les enseñaba a los otros dos niños a perfeccionar su tiro y les iba bastante bien. A decir verdad, Diddy se sentía tan bien de poder jugar con otros niños. Y mientras jugaban, iban conversando.

—Oye, Diddy, ¿y qué tal te ha ido con Dixie? —le preguntó Ricky en un tono pícaro.

—Pues de lo mejor —respondió Diddy sonriente mientras lanzaba otra flecha.

—¿Y la quieres mucho? —agregó Melvyn en el mismo tono.

—Demasiado. Ella es increíble —respondió Diddy antes de dar pequeño suspiro—. Más que solo mi novia es la mejor amiga que he podido conocer.

—Vaya, amigo, ¿y cómo lograste conquistarla, eh? —le preguntó Ricky con curiosidad y dándole pequeños empujones.

—Pues no lo sé, se podría decir que solo sucedió —respondió Diddy encogiéndose de hombros y sonriendo—. Fuimos muy buenos amigos por un buen tiempo. Ella me gustaba mucho, y cuando por fin se lo iba a decir, me dijo que yo también le gustaba... y también me dijo que ella ya lo sabía.

—¿En serio? ¿Y cómo se enteró? —preguntó Melvyn mostrándose asombrado.

—Porque esos cuatro tontos de la escuela se lo dijeron —respondió Diddy torciendo los ojos al recordarlos—. Me habían robado un cuaderno donde yo tenía escrito el nombre de Dixie en un corazón y se lo mostraron a ella.

—¡¿Qué?! —exclamó Melvyn antes de cruzar los brazos—. Cielos, qué malvados.

—Ay, de verdad que eran mala onda esos compañeros que ustedes tenían —comentó Ricky con disgusto.

La Isla del Huracán [Diddy Kong x Dixie Kong]Where stories live. Discover now