-¿Estás segura de esto? -Isa me miró mientras subíamos al avión.
-Tú saltas, yo salto. -la tomé de la mano mientras nos sentábamos.
-Esta es la mejor decisión.
-Espero que lo sea... realmente espero que estemos haciendo lo correcto.
Isa y yo dormimos todo el vuelo, esa noche soñé con Charles y con Carlos.
Soñé que caminábamos los cuatro por la playa como lo solíamos hacer, los cuatro reíamos y hacíamos bromas sobre nuestro futuro.
Una ola gigante se acercó hasta nosotros y comenzó a llevarse a Carlos, yo corrí como pude pero Charles me sujetaba demasiado fuerte, me zafé de su agarre y corrí. El agua comenzó a entrarme por la nariz, en un abrir y cerrar de ojos me encontraba debajo del agua.
Carlos estaba sujetándome, pero al darse cuenta de que me estaba ahogando me soltó. Llegué hasta la orilla y comencé a gritar su nombre.
-¡Jane! ¡Despierta, ya llegamos! -la voz de Isa hizo que me despertara, mis ojos estaban llenos de lágrimas y mi pecho subía y bajaba. -¿Estas bien? -me miró con preocupación.
-Si, solo fue una pesadilla.
Bajamos del avión y tomamos un autobús. Nada de primera clase, nuestra vida había cambiado y aunque aún teníamos dinero ambas queríamos vivir una vida común y corriente.
Al llegar a la central tomamos nuestras pequeñas maletas y caminamos hacia nuestro nuevo hogar, se encontraba a orilla de playa. No era una casa normal, más bien era una mansión, ambas la miramos con la boca y los ojos bien abiertos.
-Creí que tendríamos una vida normal. -dijo Isa señalando la casa.
-En mi defensa se veía más chica en las fotos. -me encogí de hombros.
Las dos nos reímos y pasamos, la casa era enorme con la típica arquitectura española. Nuestro hogar era perfecto para nosotras.
De repente mi mente se iluminó.
-Tenemos que comprar una carriola, una pañalera, una cuna, biberones... -me comencé a emocionar, no habíamos tenido tiempo para festejar... aunque era un festejo triste debíamos de recibir alegremente a nuestra nueva personita. -Oh por dios, tenemos tantas cosas que hacer.
-Tranquila Jane, no te preocupes...
-Claro que me preocupo, ahora estamos juntas en esto. -señalé su pancita y me acerqué. -¿Puedo? -Isa asintió con una gran sonrisa, y yo toqué su pancita. -Muy bien bebé, ahora tienes a dos mujeres que te cuidarán, te juro que jamás te faltará nada.
-Gracias Jane. -Isa comenzó a llorar, yo me levanté y la abracé. Esto iba a ser difícil pero no imposible, siempre tendríamos a Carlos cuidándonos desde el cielo o desde cualquier lugar en el que se encontrara.
YOU ARE READING
QUESTION...?
FanfictionJane Agnelli, hija de uno de los dueños más importantes de ferrari asiste una noche a una fiesta porque tiene el corazón roto, en esa fiesta toma algunas malas decisiones que hacen que su futuro cambie. ¿Qué pasaría si Jane tiene que decidir entre 3...