Moonlight La Saga | B.B The 100

Monty, ayudame

Hola corazones, el último cap lo leyeron 90 personitas pero ni si quiera 30 votaron así que voy a pedirles que ahora mismo (para que no se olviden al acabar de leer el cap) le den a la ☆ y dejen su voto, porque bien que disfrutan leyendo y deben apoyar al escritor.

Y no mucho más, he estado subiendo un par de edits más así que pasaos a dejar vuestros comentarios, me encanta leeros por ahí y por aquí.

MONTY GREEN, I NEED YOUR HELP.

Lilith se dirigía hacia la estación Walden a paso rápido, una idea se le había pasado por la cabeza, pero antes, debería asegurarse y afirmar que sus sospechas fueran certeras.

Lilith quería entrar en el despacho del Canciller Jaha, para duplicar documentos y encontrar la "solución" que habían propuesto para la falta de oxígeno.

Ella no tendría problema en desactivar el lector, o hacer una falsa copia de este, pero aún así, las cámaras de los guardias le impedían esa misión suicida, quien sería alguien capaz de desactivarlas?

Su viejo amigo, Monty Green.

Por eso ahora Lilith caminaba con prisa a la zona de agricultores, donde Monty siempre solía estar en compañía de su querido mejor amigo Jasper.

Llego a la sala de agricultura, la señal metálica sobre la puerta corredera se lo indicaba, la puerta se abrió, dejando ver maquinas, utensilios, grandes plantaciones...

Monty se encontraba junto a Jasper de espaldas a la puerta, ambos apoyados en la mesa de metal, Monty plantaba mientras Jasper solo le daba conversación.

-Monty y Jasper...-Lilith susurró con una sonrisa, llamando la atención de ambos que se giraron buscando a la voz femenina, encontrándose con la figura de Lilith.

-¡Lilith!-Ambos la abrazaron emocionados, los tres solían ser muy amigos hace muchos años, y seguían siéndolo, no ocurrió nada en específico, pero cuando su madre seguía con vida le animaba a socializar y gracias a eso era amiga de media Arca, ahora que ella no estaba, por orden de su padre, solo se debía juntar con buenas influencias.

-¿Dónde has estado? Llevamos sin verte meses-Cuestiono Monty animado por la visita de su vieja amiga-He estado bastante ocupada, ya sabes, padre-Lilith dio una mueca y ambos lo entendieron sin problemas.

-He venido porque, necesito tu ayuda-Lilith dijo esta vez con el rostro más serio, Monty le dio una mirada de preocupación, pero aún así, asintió con lentitud.

Lilith, Monty y Jasper se encontraban en la vieja enfermería abandonada, que ahora se utilizaba más como trastero, casualmente, esta era la sala más cercana a la habitación/despacho del Canciller Jaha.

Lilith había conseguido que Monty le ayudará a desactivar las cámaras y poder colarse en el despachó, también sugirió utilizar los conductos de ventilación en vez de hackear el lector.

-Aquí tienes el mapa y el walkie, te indicaré si se acercan los guardias, preparada?-Monty cuestiono ofreciéndole ambas cosas, ella las recibió asintiendo.

Jasper desentornillo la rejilla de ventilación, dando paso a Lilith, si algo amaba de su amistad con los chicos, es que si cualquiera necesitaba algo lo hacían sin preguntar.

Lilith suspiro sintiéndose sofocada por la presión y el temor de que la descubrieran, no importará su apellido, esto no tendría perdón para ella, y conociendo a su padre, después de lo que había hecho, dejaría y amaría que la flotaran.

Los minutos que estuvo arrastrándose por el camino de la ventilación fueron inundados por silencios interrumpidos solo por su respiración y el molesto chirrido que sus piernas provocaban al deslizarse por el tuvo de metal.

En la eternidad y oscuridad del trayecto, Lilith se hizo un sinfín de preguntas, pero sólo deseaba conseguir la información y volver junto a Bellamy sin que ella o sus amigos fueran descubiertos.

No se habia planteado hasta ese entonces qué era lo que podía encontrar en el despacho. ¿Qué sucedería si lo que encontrará pusiera en peligro a la sociedad? ¿Que haría con esa información? ¿La revelaria o simplemente traicionaria sus principio manteniéndola en secreto para su investigación?

Principios...

Lilith se cuestiono cuáles eran sus principios, esos en los que su madre se molestaba en repetir constantemente para que Lilith no los callara o traicionara ante los demás.

¿Porqué hablaría ella? ¿No estaba cómoda con la vida que tenía? Su dolor era grande pero nada comparado con el de los demás.

Siempre que murmuraba la mínima queja todos le recordaban que muchos ciudadanos de Walden y Arcadia deseaban vivir como ella, olvidarse de las pocas escasas raciones de comida por día, los litros de agua contabilizados, la ignorancia del gobierno hacia las zonas más humildes.

Su madre se había muerto, y había estado obligada a ser el trofeo de su padre y luego a estar junto a alguien que no amaba y además abusaba de ella constantemente, pero no podía quejarse, ese dolor no era nada comparado con el de los demás.

No debía ser como su padre y poner su dolor sobre el de los demás.

Porfin llegó al final del conducto, destornillando la rejilla de ventilación y saliendo por ella, pestañeo varias veces para adaptarse a la luz de la oficina del Canciller Jaha.

Todo estaba como cuando solía venir con su padre o de pequeña gracias a su madre a jugar con Wells.

La mesa a la derecha del fondo de la sala con su silla y dos gran cuadros sobre este, uno de la tierra hace millones de años y el otro del primer día de la Unidad.

Se quedó embobada por un momento hasta que volvió al presente, debía terminar con esto cuanto antes.

Camino con rapideza y cautela hacia el escritorio, donde presiono el botón azul eléctrico sobre este y apareció el holograma delante de sus ojos.

Lilith movio el holograma con su mano, el escritorio del ordenador era un completo cúmulo de información, había muchas cosas en el inicio, separadas por carpetas de líneas azuladas.

Arrestos, perfiles de civiles, perfiles de guardias, perfiles de políticos, registro de difuntos y registro del Arca...debía estar ahí.