Puedes correr pero no esconderte: Parte II

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Hasta ahora ya deberían tener una escena de acción decente, pero podría mejorar. Aquí les dejo más herramientas para que vayan incluyéndolas donde crean pertinente. Una oración por aquí, otra por allá. Es como darle más color a una escena medio grisácea.

TERCER PASO: MÁS RECURSOS

Diálogos:

Esto es muy útil para agregar sentido de urgencia, avanzar la trama, mostrar los pensamientos y motivaciones de los personajes.

Prueben incluir órdenes gritadas o intercambio de palabras tensas entre los personajes. Si uno está estresado, no va a expresarse con calma o amabilidad.

Tengan en cuenta que deben ser diálogos breves y directos, que refuercen la emoción e intensidad. Ya saben lo que pasa cuando el villano da un discurso eterno en vez de rematar rápido a sus víctimas. Además, si los personajes están corriendo no tendrán tiempo (ni aire) para empezar un monólogo. Un comentario rápido por aquí y por allá mantendrá la escena en movimiento.

Otra forma de aprovechar los diálogos es aumentar el sentimentalismo y drama. Los personajes pueden llorar mientras confiesan su amor al verse acorralados, o gritarle una maldición al enemigo. Esto ayudará a sumergir al lector en la acción y crear una conexión emocional.

Pausas y momentos de calma:

No siempre tienen que estar en constante movimiento. Denle un respiro a los protagonistas, momentos en los que se dedican a planear sus próximos pasos o encuentran un refugio temporal para recuperar el aliento. Sin dejar de sentirse en peligro, por supuesto. Estos descansos, irónicamente, ayudan a alimentar la sensación de calma antes de la tormenta.

Enfoque en las emociones:

Esto es clave para que los personajes se sientan más realistas y los lectores conecten con ellos. Intercalen, entre tantas acciones, breves descripciones de las emociones que experimentan los protagonistas.

Aquí podrían incluir pensamientos, diálogos internos. Métanse en sus cabezas, en sus preocupaciones y objetivos a corto plazo.

Cuidado, que la introspección en exceso puede resultar tediosa.

Enfoque en las sensaciones físicas:

Estas pueden aparecer fusionadas a las emociones. Dediquen momentos a describir qué siente físicamente el personaje. Dolor, agotamiento, ardor por una herida, náuseas, calambres, falta de aire.

Jueguen con la tensión muscular y emocional. Describan cómo se tensan antes de dar un golpe, cómo se preparan para saltar o cómo se frenan para detenerse de repente. Muestren cómo la emoción está afectando a los personajes, si están suspirando, gritando, sudando, temblando, etc.

Detalles como el sonido de los huesos quebrándose, la sensación de la piel tensa y sudorosa, la aceleración del ritmo cardíaco aumentan la sensación de peligro.

Además de lo corporal, no olviden las expresiones faciales. Pueden describir las miradas de terror, las cejas fruncidas, los puños apretados, el sudor que corre por la frente, etc.

Cambios en la perspectiva:

Si hay más de un personaje luchando por su vida, pueden dedicar momentos a mostrar la perspectiva de uno, y luego pasar a contar la del otro.

Piensen que no es necesario limitarse a cómo el protagonista ataca y se defiende, también pueden mostrar lo que hace el villano, dedicar uno que otro párrafo a sus movimientos, emociones y expresiones. Como filmar lo mismo desde distintos ángulos.

Cambios en la narrativa:

También pueden incluir flashbacks breves que expliquen el trasfondo de la escena, o revelaciones sorprendentes que cambien el curso de la trama. Una revelación inesperada podría ser que, en plena pelea, el protagonista descubre que quien creía su enemigo en realidad es un ser querido, o que no estaba tratando de matarlo sino de protegerlo.

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