¿VAMOS POR LA SEGUNDA?🤔🫤😳

7 3 0
                                    

¡HOLA! Espero hayan tenido buena semana, gracias a Dios me permite estar de vuelta después de una semana de muchas actividades para poder continuar escribiendo, esperando sea de bendición a sus vidas y no solo puedan apoyarme votando o leyendo aquí en wattpad, sino también compartiéndolo con personas de su entorno cercano.

✨️✨️✨️✨️✨️✨️✨️✨️✨️✨️✨️


En la sección anterior escribí sobre una primera cita, lo emocionante que es y lo especial que puede sentirse estar en un momento de convivencia acordado entre tú y esa persona especial. Sin embargo, conforme avanza este momento derrepente comienzan las dudas, los temores, las inseguridades de no saber si es correcto permitir más momentos como ese...

El permitir una segunda cita parece algo realmente crucial, ¿por qué?

Una segunda cita denota interés, en la primera todo se busca hacer bien, de alguna forma existen más nervios por el ¿Cómo será? y el ¿De qué platicarás con esa persona? pero con el permitir que haya otra ocasión así definitivamente querrás decir que no fue de tu desagrado y que, por el contrario te has sentido cómodo(a) e interesado(a) como para abundar más y tener una comunicación así tan frente a frente, como dicen en francés: "tête à tête"

"Al estar con menos nervios de alguna forma en primera instancia comienzas a mostrar mas sobre tu personalidad, eres mas abierto(a), de alguna forma te muestras mas real y con reacciones mas naturales''

Cuando fui niña mi primer acercamiento con Dios fue maravilloso, sin embargo en mi adolescencia entre los 12-15 años, fue que comenzaron a surgirme muchas dudas, me llené de temores, me angustiaba por muchísimas cosas. Al pasar por ciertos problemas familiares en aquel entonces, mi fe y mi atracción por Dios disminuyo, de alguna manera estaba perdiendo mis sonrisas, mi vida espiritual se comenzaba a apagar y esa niña servicial y alegre que les redacté al principio comenzaba a dejar entrar a su mente muchos miedos y así como el ejemplo anterior de la joven que dejó de prestar atención a todo lo que el amable joven le decía a ella, así mismo cuando menos pensé mi mente yacía por ahí divagando en otras cosas y fue así que deje de escuchar la voz de Dios y las hermosas promesas que Él me quería hacer saber...

Dios me llamaba a tener una segunda cita con Él, estaba preparando para mi una gran sorpresa llena de promesas de vida pero en aquellos tiempos por no aceptar todo lo bueno, mi vida se comenzó a llenar de tristeza, de falta de esperanza y no por que Dios quisiera eso para mi, sino por que yo misma me estaba negando a la idea de mantenerme enamorada y emocionada como aquella primera vez que escuche de Él.

MEDITA:

Hoy colocare aquí el "Salmo 42 (RVR1960)"; cuando dejamos entrar las dudas y el temor, nuestra alma se abate, nos comenzamos a cerrar sin darnos cuenta y de forma muy sutil vamos removiendo a Dios, entonces nuestra atención se desvía a prestar más tiempo a todo tipo de pensamientos menos a los que Dios quiere que tengamos y en consecuencia, la idea de una segunda cita se vuelve dudosa en lugar de ser afirmativa con un rotundo "si".

Esto no solo aplica para los nuevos creyentes sino incluso para aquellos que llevamos años, puesto que en ocasiones seguimos prestando atención a las distracciones que nos alejan de Dios y cerramos el corazón en cosas vanas, lo que nos impide acercarnos a Él una y otra vez, constantemente.

¿Por qué te llenas de dudas? ¿Por qué tienes tristeza? ¿Por qué abates tu alma cuando Dios tiene para ti grandes promesas y palabras de amor incontables?

¡ESPERA EN DIOS! Les dejo en la parte de arriba un canto y te animo a recordar las fidelidades de Dios.

Salmos 42
Reina-Valera 1960
LIBRO IIMi alma tiene sed de DiosAl músico principal. Masquil de los hijos de Coré.

Como el ciervo brama por las corrientes de las aguas,

Así clama por ti, oh Dios, el alma mía.

2 Mi alma tiene sed de Dios, del Dios vivo;

¿Cuándo vendré, y me presentaré delante de Dios?

3 Fueron mis lágrimas mi pan de día y de noche,

Mientras me dicen todos los días: ¿Dónde está tu Dios?

4 Me acuerdo de estas cosas, y derramo mi alma dentro de mí;

De cómo yo fui con la multitud, y la conduje hasta la casa de Dios,

Entre voces de alegría y de alabanza del pueblo en fiesta.

5 ¿Por qué te abates, oh alma mía,

Y te turbas dentro de mí?

Espera en Dios; porque aún he de alabarle,

Salvación mía y Dios mío.

6 Dios mío, mi alma está abatida en mí;

Me acordaré, por tanto, de ti desde la tierra del Jordán,

Y de los hermonitas, desde el monte de Mizar.

7 Un abismo llama a otro a la voz de tus cascadas;

Todas tus ondas y tus olas han pasado sobre mí.

8 Pero de día mandará Jehová su misericordia,

Y de noche su cántico estará conmigo,

Y mi oración al Dios de mi vida.

9 Diré a Dios: Roca mía, ¿por qué te has olvidado de mí?

¿Por qué andaré yo enlutado por la opresión del enemigo?

10 Como quien hiere mis huesos, mis enemigos me afrentan,

Diciéndome cada día: ¿Dónde está tu Dios?

11 ¿Por qué te abates, oh alma mía,

Y por qué te turbas dentro de mí?

Espera en Dios; porque aún he de alabarle,

Salvación mía y Dios mío.

UNA COSA TENGO CONTRA TIWhere stories live. Discover now