22

279 53 1
                                    

El auto estaba en un completo silencio y Yibo solo iba con la vista por la ventana sin prestar atención a nada más, Zhan por su parte, estaba odiandose al ver los ojitos rojos de su minino y su naricita de igual color.

Cuando llegaron a su casa Yibo ni siquiera bajo del auto a pesar de que su alfa fue a abrirle la puerta.

Solo se quedó sosteniendo su vientre y su respiración poco a poco se detuvo sin que el mismo se diera cuenta.

Zhan tenía razón en estar molesto, puso en riesgo la vida de su filetito por un tonto impulso de Omega celoso.

No tiene ni la mitad de las cosas que un Omega debería de tener para merecer ser papá, primero no quería hijos pero se puso muy feliz al saber de su filetito y ahora lo pone en riesgo.

— Soy un estúpido — susurro para luego sentir nuevamente sus mejillas húmedas y volver a respirar pero rápidamente y entre cortado.

— Minino — intento tocarlo pero este se alarmó y lo empujo para ir a la puerta de su casa.

Una vez la abrió se transformó al escuchar a su alfa ir tras él y se escondió bajo un sillón a soltar sollozos lastimeros y frotar ambas patitas por su rostro.

Zhan estuvo toda la tarde intentando hacer que saliera, pero este no comió, bebió o salió de ese lugar en todo el día.

— mi amor...— se acerco sigilosamente al escondite con un plato con dos filetes y también un vaso de chocolatada, su cena también iba en la bandeja, aunque si Yibo no comía, él tampoco lo haría. — podemos cenar juntos ¿Por favor? — no recibió ni un solo sonido a eso — Se que estuve fatal al enojarme contigo y me comporte como un verdadero idiota. ¿Tú...Quieres perdonarme?

El tigrecito emitió un pequeño sollozó, NO. Fue lo que quiso decir, no hacía falta adivinar, Zhan lo sabía.

— Soy muy mal alfa por no ponerme de tu lado y actuar como un patán y un imbécil contigo, debí quedarme a tu lado...Sé que no merezco que mi Omega me perdone, dejaré que tomes tu tiempo, herí tus sentimientos y lo merezco.

Sus palabras salieron con mucha dificultad, realmente se sentía mal por la forma en la que trato a su minino y sabe que Yibo es un Omega que realmente es especial y si lo jodes no importa cuánto te quiera, acepta el castigo por lastimar su corazón.

Vio como una patita salía de abajo para intentar jalar un pedazo de carne con sus garritas, pero cuando él acerco el plato un chillido salió y se volvió a esconder.

— ¿Estás asustado de mi?

No hizo nada más que intentar hacerse más pequeño en su lugar cuando su alfa lo vio.

Y si, estaba dolido y aterrado.

Zhan solo una vez, una, lo ha visto con los ojos con los que lo vio hoy todo el día, su mirada cambio hasta que iban saliendo del doctor pero nada quita que su instinto de Omega lo haga aterrarse de que su alfa lo viera de una manera tan colérica y que estuviera a nada de gritarlo con su voz de mando.

Solo era un Omega embarazado después de todo.

Y como cualquier omega, empezaron los laberintos en su cabeza, ¿Esto es de cualquier Omega? Todos decían que el era diferente y todo eso pero...Bueno.

De tantos problemas, Zhannie se cansará de nosotros.

¿Y si nos quiere separar de nuestro bebé? ¡De ningún modo! ¡Es MÍ filetito!

Nos mira...Quiero salir de aquí.

Cuando Zhan por fin se quedó dormido, sentado esperando a que el saliera, al fin lo hizo. Salió y se fue a dormir a la habitación de huéspedes. Todo sin hacer un solo ruido, tenía mucha hambre, pero no quería que Zhan se despertara.

Así que ignorando su pancita se fue a dormir.

A la mañana siguiente, el primero en despertar fue el alfa, no termino de abrir bien los ojos cuando ya estaba asomándose para ver si su mínimo ya había salido de ese pequeño lugar. Afortunadamente sí.

Busco en la habitación que ambos compartian y su sorpresa fue enorme al no encontrar a su omega ahí, siguió su sutil aroma hasta la habitación de huéspedes de su hogar.

Ahí por fin lo vió, estaba completamente dormido, su vientre un poquito descubrió y aferrado fuertemente a una almohada, también vio como este arrugaba su nariz y empezaba a abrir sutilmente sus ojitos.

Yibo pegó un brinco en su lugar e intento escapar de nuevo, pero su alfa fua más rápido y aún en su hermoso chico pelinegro lo atrapó en sus brazos escuchando a este reclamar y sintiéndolo forcejear.

— suéltame. Xiao Zhan suéltame.

— por favor, escúchame.

— No quiero, No quiero, No quiero. Me lastimaste ¡Quién trata de esa forma a su Omega!

— perdóname mi amor, golpeame todo lo que quieras, lo merezco. No te merezco...Minino no estuvo nada bien lo que hice, perdóname, bien sabes que tú y nuestro bebé significan todo para mí, y en serio mi lobo se sintió herido al ver que no nos tenías confianza para contarnos que no te llevabas bien con esa desgraciada y también me asuste muchísimo cuando la ví golpeandote y golpeando a nuestro cachorro.

— se que estuvo mal haberme peleado, pero realmente no quiero que alejes a mi hijo de mi.

— ¡¿Qué?! Eso jamás ha pasado por mi mente...Ustedes son mi alma, mínimo. Perdóname por favor.

— Solo si prometes no volver a dejarme solo y también lo siento mucho alfa, estaba aterrado...

— No tienes porqué, me quitaría la vida antes de lastimarte a ti o nuestro cachorro.

— filetito.

— si, filetito, lo siento.

La mañana fue mucho mejor, la pareja disfruto de una buena reconciliación de mimos y momentos dulces.

Yibo a veces se pregunta ¿Cómo es que Zhan puede ser tan relajante pero a la vez la persona que más desata sus nervios? Aunque la mayoría del tiempo siempre ha sido como su sueño hecho realidad.

Yibo ama tanto a ese pulgoso. Y Zhan no sabe ni como describir todos lo que siente por ese omegita al que juro jamás volver a hacer sentir mal en toda su vida, el es su alfa, no tiene porqué causarle dolor, si no, felicidad y tranquilidad.

Bien, esto es dulce, pero...Cómo que tengo ganas de hacer el amor.

No jodas, no ahora.

Vamos, nuestro Omega es un encanto, el embarazo le sienta de maravilla.

Jodete, no ahora, el quiere mimos no tus cochinadas.

Bien. Mañana será.

Minino 2Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang