One shots - Multifandom

•Kim Seokjin•

—¡Suzy! Maldita sea apresúrate. Te voy a dejar.

Los gritos incesantes de Taehyung me estaban colmando la paciencia. Aunque sí, un poco de culpa tenía yo que comencé a arreglarme un poco tarde aún sabiendo que saldríamos.

Salí corriendo de mi habitación y lo miré poniéndose sus zapatos para salir del departamento, rápido me apresuré a hacer lo mismo y lo perseguí hasta al auto.

—No te cuesta nada esperar un poco, hermanito.

—Media hora tenía esperándote —rodó los ojos al momento en que conectamos miradas— Hacia la agencia por favor —indicó al chofer quien asintió para después poner el auto en marcha.

—Que malo, hermanito —me reí mirando por la ventana, aún así siempre conseguía lo que quería— Por mas que te quejes sabes que siempre cederás.

—Maldita niña desobedecida, ¡Y háblame con respeto!

—¡Tú háblame bonito! —hice un puchero de esos que también le encantaba a hacer a él.

—Ni siquiera se por que este último tiempo tienes interés en ir a vernos ensayar —hablo después de unos segundos en silencio, sentí su mirada así que también lo miré— Digo, no hacemos nada que no hayas visto ya, aparte casi siempre peleamos o nos reímos muy alto, también hacemos muchos corajes, también sudamos mucho, con estás nuevas coreos a veces nos quitamos las camisas, bueno, Jin y Namjoon, pero.. —yo estaba tratando de no reírme mientras hablaba, él dejo de hacerlo y guardo silencio unos segundos.

—¿Ya te carburo? —comencé a carcajearme en cuanto lo miré rojo como un tomate del enojo.

—¡Deténgase aquí por favor, esta se va a bajar! —pidió al chofer a gritos.

—¡Oye tampoco seas grosero! —le reclame, ofendida.

El chofer ni siquiera se detuvo porque sabía que era una simple pelea más como todas. Nos conoce muy bien.

—Solo vas para ver a mis amigos encuerados —se cruzó de brazos.

—Nuestros amigos querrás decir —me reí.

—Son más míos que tuyo, loca.

—Déjame a Jungkook solamente y ya no digo nada —bromeé, él me dio un golpecito en la cabeza y yo comencé a quejarme.

—¡Respétame!

—Bueno, como Jungkook es tuyo yo me quedo con Jin, y listo.

—Sí, mucho mejor así, de verdad que..

Comencé a reírme.

—Deja a Jin en paz —me señaló, ahora mirándome seriamente.

Ay hermanito, si supieras.

—¿Por?

—¿Por? —exclamó incrédulo mirándome con los ojos como grandes canicas pareciendo como si estos fueran a salirse de su cara— ¡¿Será por que te lleva siete malditos años?!

—Oppa, no es tanto en realidad. Aparte tengo veinticuatro y se muy bien que hacer con mi vida, no soy una niña.

—Pareces una niña de dieciocho.

—Jin no parece de treinta y uno, ya dejalo.

Él volteó los ojos, lo único que sabe hacer.

—Hemos llegado —anunció el chofer.

Ambos bajamos del auto haciendo una reverencia para después yo seguir a Tae aunque me sepa el camino de memoria.

Luego de unos minutos llegamos a su sala de práctica en la cual ya estaban todos, bueno, no todos, faltaba Seokjin.