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En cuanto la noche comenzó a avanzar y con ella las botellas de whisky, Arabella había pensado que era momento de regresar a su hogar, en esta oportunidad junto a la compañía de Tommy... la pareja había abandonado al par de hermanos Shelby para adentrarse en las sombrías calles de Birmingham. De noche solía ser más aterradora que de día, pareciera que todo lo que observabas durante el día tomaba intensidad para mostrártelo en la noche, borrachos por las esquinas, Arabella podría haber jurado que vio a un hombre abalanzarse sobre una mujer mientras caminaba del brazo de Thomas, los adoquines parecían aún más mugrosos que con la luz del día dándoles de frente y sin duda alguna parecía ser más apestoso...
Dejando atrás la imagen del pueblo, la pareja llegó al hogar de la castaña. Arabella se quedó de pie frente a su puerta mientras a su mente llegaba el recuerdo de que Ada había quedado en su hogar unas horas antes, suspiró encogiéndose de hombros asumiendo la posible guerra entre hermanos se podría desatar, en ocasiones lidiar con los hermanos Shelby no era la actividad favorita de la castaña, amaba a la familia, pero sus problemas iban a escalas mayores.
Fue una fortuna quizás entonces que al momento de entrar a su hogar no hubiese rastro alguno de Ada, quizás la joven de los Shelby intuía que su amiga llegaría en compañía de Thomas.
Su cabeza se ataba llena de dudas, a pesar de que en aquel momento debería ser de ensueño tras reencontrarse con el hombre que amaba, la cabeza de una mujer jugaba de muchas formas y la de Arabella se creaba más escenarios de los posibles, muchas veces acertados y otras veces encaminados a la verdad, es por eso que creía tanto en su instinto y en las sensaciones que le daban las personas ¿Bruja? Eso sería muy ambiguo, solo se guiaba por sus instintos y estos nunca la engañaban... por eso no confiaba en Grace había compartido una pequeña conversación con la camarera y no la comprendía. Sabía que algo estaba escondiendo, lo podía ver por la forma en la que se desenvolvió con ella.
Quizás la rubia era un peligro no solo para Tommy si no para toda la familia Shelby en si, tendría que averiguar, observarla si era necesario pues le había picado el insecto de la curiosidad y quizás no una curiosidad buena.
-¿En que estás pensando?
La voz del mayor la atrajo de sus pensamientos, la mano de Tommy recorría la espalda desnuda de Arabella mientras la joven de ojos verdosos se dedicaba a acariciar el torso al desnudo del mayor, soltando un ligero suspiro se encogió de hombros, mientras alzaba su vista para alcanzar los orbes azules.
-En Grace.
-¿En Grace?
-Si, ella no encaja aquí y su forma de actuar es...extraña, Ada mencionó que llegó aquí poco tiempo que apareció un Policía.
-¿Viste a Ada?
-¿Por que no vería a Ada? Tú estás enojado con ella, yo la adoro y no me cambies el tema Thomas, no me vas a decir que no es al menos un poco extraño.
